El pollo frango de Mercadona y la pizza caducada, el lío monumental que se ha hecho viral

Los nombres de algunos productos de los supermercados valencianos han llevado a más de una confusión

Pollo frango Mercadona: El lío con los nombres de una pizza se vuelve viral

Pollo frango Mercadona: El lío con los nombres de una pizza se vuelve viral / Foodio/Shutterstock

Claudia Rodrigo Roig

Claudia Rodrigo Roig

Los supermercados Mercadona tienen establecimientos ubicados por toda España pero también por Portugal. Esto hace que encontremos en el etiquetado palabras en ambos idiomas (español y portugués) pero parece que para muchos clientes de Mercadona esto no está del todo claro. 

En redes sociales se ha hecho viral recientemente la peculiar recomendación que un amigo realizó a otro de una pizza de Mercadona. El tweet ha sido compartido desde la cuenta @mikoyangure. En ella dice: “Coge un colega hoy y me dice “Bro, la pizza de pollo frango del Mercadona es lo máximo” le pregunto qué coño es pollo frango, me dice que no lo sabe, me enseña la foto y es esto”. 

Y lo que podemos ver no es otra cosa que una pizza de pollo y bacon de Mercadona. El caso es que, como comentábamos anteriormente, aparece el nombre de la pizza en español (pollo) y, a continuación, en portugués (frango). El amigo pensó que era el nombre completo de este producto pero no, es la misma palabra en ambos idiomas.

De esta foto a lo que derivó a continuación tampoco podemos dejar de hacernos eco. Porque los twitteros, que lo miran todo al detalle, repararon en la fecha de caducidad de la pizza. Y sí, estaba caducada… ¡dos años caducada! Lo que no queda claro es que si el amigo tenía esa pizza en su casa, dos años caducada, o si buscó la foto en Internet y se la mandó. Con esa duda nos quedaremos.

Pollo frango y la catalanofobia

El etiquetado en español y portugués ya tuvo su momento de gloria hace unos años cuando Maria Lucila Villegas Losada decidió preguntar en el Facebook de Mercadona por lo que ella consideraba una imposición en toda regla. 

El mensaje decía: “Una cosa que noté el miércoles que estuve fue que nos quieren imponer el catalán a la fuerza. La mayoría de los productos que compro, porque me encantan, como el arroz con pollo, el pisto y la parrillada de verduras, vienen ahora en catalán. Deberían de respetar. Estamos en Andalucía. Y no hay que imponer una lengua”.

La respuesta de Mercadona fue de lo más correcta: “Buenos días María Lucila, probablemente se trate del etiquetado en portugués. Debido a nuestras próximas aperturas en Portugal muchos de nuestros productos estarán etiquetados tanto en castellano como en portugués. Un saludo”. 

Maria Lucila tiene que estar tranquila, no intentan imponerle el catalán, sólo enseñarle portugués.