La mini nevera de Lidl que está volando de las tiendas: no puede ser más barata

Ahora que llega el verano seguro que ya piensas en equiparte para ir a la playa y a la piscina. El bañador, la toalla, la sombrilla, el protector solar… innumerables artículos en los que ya tienes puesta la mente y que seguro que tienes metidos en la bolsa.

Pero si algo caracteriza a pasar un día en la playa es también ir a comer algo. No hay español que se precie que no vaya a la playa con su botella de agua, sus refrescos, algo de picar o la merienda de los niños. Es lo más habitual.

Lidl lo sabe y por eso ha puesto a la venta en tienda y online dos bolsas isotérmicas que bien pueden hacer la función de neveras. La primera de ellas se trata de una bolsa isotérmica con un bolsillo frontal que se cierra con una cremallera. Es ideal para llevarla tanto de bandolera como al hombro ya que tienen altura regulable.

Con esta bolsa podrás mantener frías tus bebidas y alimentos durante seis horas a unos 5 grados. El compartimento para meterlo todo es grande y además tiene una base plana para colocar las cosas de forma segura. Cuenta con un compartimento exterior adicional y tiene una capacidad de unos 11 litros. Está diseñada en dos tonos de azul y cuesta 7,99 euros.

El otro modelo de bolsa isotérmica tiene la misma capacidad y se puede llevar únicamente como bandolera. Al igual que la anterior tiene un compartimento principal bastante amplio y luego un bolsillo frontal para meter más cosas. También está en color azul y cuesta 7,99 euros.

Lidl, éxito internacional

Lidl es una cadena internacional de supermercados de origen alemán que se caracteriza por su enfoque en la calidad y la asequibilidad. Fundada en 1930 por Josef Schwarz, la empresa se ha expandido rápidamente a nivel mundial y actualmente cuenta con más de 10.000 tiendas en 32 países.

Los productos de Lidl incluyen una variedad de alimentos frescos, congelados y enlatados, productos de limpieza, artículos para el hogar y una selección de bienes de consumo. La empresa también vende una gama de productos de marca propia, lo que le permite mantener precios bajos y competitivos en comparación con otras cadenas de supermercados.

Una de las estrategias clave de Lidl es su enfoque en la eficiencia operativa. Sus tiendas suelen ser más pequeñas que las de otras cadenas de supermercados, lo que facilita la administración y la limpieza. Además, utiliza un sistema de reposición rápida de mercancías para asegurarse de que los productos estén siempre disponibles para los clientes.