El hombre, cuya identidad y nacionalidad se desconocen, aparece en alrededor de cien fotos de una serie de 800 que se cree fueron tomadas en el Sudeste Asiático y muestran abusos sexuales cometidos a al menos tres niños de entre seis y diez años.

Interpol ha colgado en su página web un retrato del sospechoso, obtenido por la Policía de Noruega en marzo de 2006.

El jefe de la oficina de Interpol en Bangkok, coronel Apichat Suriboonya, no confirmó la presencia del supuesto pederasta en Tailandia y admitió que en todo caso será muy difícil dar con él.

Indicó que este caso es más complicado que el de Christopher Paul Neil, el pedófilo canadiense que arrestaron el pasado octubre.

"No tenemos ninguna información sobre si está aquí o no. No es como con Neil, sabíamos su nombre y también su número de vuelo", dijo Suriboonya, quien explicó que Tailandia, que cada año recibe más de 15 millones de turistas extranjeros, no dispone de la tecnología necesaria para identificar a un sospechoso anónimo con apenas una foto digitalizada.

El pedófilo canadiense fue detenido tras una operación de búsqueda y captura internacional emprendida por Interpol, que le acusaba de abusos sexuales a al menos dos menores, entre otros delitos relacionados con la pornografía infantil.

Neil, quien actualmente está siendo juzgado en Tailandia, podría ser condenado a un máximo de veinte años de prisión.

Interpol investigaba desde hace un tiempo imágenes de contenido sexual distribuidas por la red de un occidental con el rostro alterado digitalmente que mantuvo relaciones con al menos 12 menores en Vietnam y Camboya, pero no pudo identificarle hasta que expertos alemanes lograron reconstruir la cara.