Los miembros de la banda acusada de asaltar casas alegan que no se conocían

La Audiencia de Alicante juzgó ayer a los cinco presuntos miembros de una banda acusada de robos en viviendas y tráfico de drogas. Cinco de los siete acusados se sentaron en el banquillo y otros dos están declarados en rebeldía y en paradero desconocido.

El fiscal pide penas que suman los 150 años de cárcel por seis robos en coches, dos en viviendas de Alfaz y La Vila y otro en una joyería de Onil. En el momento de su detención, se disponían a ir a Benidorm para el secuestro de un británico, a quien pretendían robar un cargamento de droga, según revelaban los pinchazos telefónicos. Además de estos robos, el fiscal les acusa además de asociación ilícita. La defensa pidió la nulidad de las intervenciones telefónicas. Según el abogado José Soler, la petición de las escuchas estaban poco fundamentadas, y en el expediente sólo hay una traducción de las conversaciones realizada por el intérprete de la Comisaría.

Los cinco acusados negaron tener relación entre sí y que se dedicaran a robar viviendas y traficar con drogas. En los registros en sus viviendas, se recuperaron parte de los objetos robados.