Según ha informado la Delegación del Gobierno en Ceuta, la denominada "Operación Esmalte" ha imputado ya un delito contra la salud pública a 21 personas, entre ellas dos guardias civiles destinados en Barbate (Cádiz).

De los 21 detenidos, doce están en prisión y únicamente tres son de Ceuta -todos ellos miembros de una misma familia- ya que el resto son de distintas localidades andaluzas como Barbate (Cádiz), Sevilla y Marbella (Málaga).

Los últimos arrestos se han practicado en distintas provincias andaluzas, en lugares no precisados al haber decretado el juez el secreto del sumario.

El juzgado ceutí que lleva las diligencias ya ha ordenado el ingreso en prisión de 12 de los detenidos, entre ellos los dos guardias civiles, que están en un centro penitenciario de Sevilla.

La Guardia Civil de Ceuta inició la investigación al tener conocimiento de la posible vinculación de agentes destinados en Barbate con miembros de una organización dedicada a la introducción de hachís en la península.

La operación, desarrollada conjuntamente entre la Guardia Civil y la Policía Nacional, permitió la detención en una primera fase de seis personas en Barbate y en su pedanía de los Caños de Meca, dos más en Ceuta, uno en Tarifa, otro en Utrera (Sevilla) y el último en Marbella.

La investigación empezó en Ceuta, pero las ramificaciones de los narcotraficantes por Andalucía condujeron la investigación hasta Cádiz, Málaga y Sevilla, donde se produjeron las detenciones y registros.