La madre afirma que «a mí ya me ha tocado el Gordo de Navidad»

Toda la familia de Fernando estaba nerviosa por la salida del joven de prisión, pero sin duda su madre, Teresa, era la más impaciente por poder abrazar a su hijo y volver a su domicilio de Alicante después de 25 meses. «A mí ya me ha tocado el Gordo de Navidad», afirmaba Teresa momentos antes de subirse en el autobús que trasladó a la familia. «Nosotros hemos sufrido mucho pero él también y ya no aguantaba más en prisión, estaba muy deprimido», declaró la madre, quien confesó que sintió «mucha emoción cuando lo hemos visto salir. Igual que Teresa, el resto de familiares desplazados a la puerta de la cárcel de Villena confesaba que la salida de Fernando era como si les hubiese tocado la lotería. «Pero si tiene cara de ángel; no tienen perdón de Dios», se lamentaba la abuela de Fernando mientras observaba emocionada a su nieto. El padre del joven también agradeció el apoyo que han recibido durante estos seis meses de lucha en la calle recogiendo firmas para que se revisara el caso de su hijo pero advirtió que «tenemos que seguir adelante para demostrar la inocencia de Fernando». Los familiares desplegaron ayer una pancarta que decía «Fer, toda tu familia está contigo. Te queremos». Aunque el lunes tiene que ingresar en Fontcalent, lo más probable es que le dejen pasar la Nochebuena con su familia. Luego saldrá a diario a trabajar en el taller de su tío y dormirá en prisión. P. C.