El jardinero de los Berasaluce, Marian B., negó ayer tener cualquier tipo de implicación en el asalto mortal, así como el haber facilitado a los acusados información sobre la casa. El imputado admitió que le gustaba alardear en el pueblo de que trabajaba en esa casa porque sus jefes «eran gente importante y eso era algo de lo que estaba orgulloso». Marian B., que sólo respondió a las preguntas de su abogado defensor, Francisco Galiana Botella, aseguró que desconocía dónde se guardaba el dinero y que el día en que ocurrió el golpe estaba descansando porque trabajó el domingo. Galiana Botella incidió en que los asaltantes no tenían buena información cuando fueron a cometer el golpe, por lo que difícilmente pudo ser su representado el que se la facilitara. El otro acusado de ser el inductor del golpe. Petrus R., se retractó ayer de otras declaraciones anteriores en las que sí admitió su implicación e incluso implicó a los otros acusados y lo negó todo. Según dijo, la Guardia Civil lo tergiversó todo. Jamás se habló delante de él del robo de la casa y conocía al jardinero de haberlo visto tres veces por el pueblo, pero negó que fueran amigos y sostuvo que jamás planificaron el robo en una fiesta de Nochevieja en la que estuvo Ionut R. Éste, acusado de ser uno de los autores materiales del asalto mortal, estuvo durante una temporada viviendo en casa de Petrus, pero según declaró éste, finalmente lo acabó echando porque no colaboraba con los gastos de la vivienda. J. A. M.
