A la mujer de 37 años asesinada por su expareja en Zaragoza pese a existir una orden de alejamiento de ella de más de 500 metros se le retiró la protección integral de la Policía al no considerarse elevado el riesgo de la víctima porque el agresor residía a más de 400 kilómetros, en Medina de Campo (Valladolid).

La presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, María Ángeles Carmona, afirmó ayer sobre la muerte de Soraya que una sociedad democrática y de derecho no se puede permitir que una mujer que haya denunciado maltrato por parte de su pareja sea asesinada cuando está bajo la protección del Estado. A preguntas de los periodistas en el marco de unas jornadas sobre violencia de género organizadas por el PP de Asturias, Carmona reconoció que ha existido «un fallo absolutamente innegable» en la protección de la mujer asesinada en un bar de Zaragoza a manos de su ex pareja, a la que había denunciado por amenazas.

Resaltó que «lo que no se puede permitir es que una mujer que haya realizado el acto heroico de dar el paso de denunciar los malos tratos, que es una cuestión muy difícil, tenga que morir asesinada», subrayó Carmona.

No obstante, la presidenta del Observatorio indicó que es fundamental que las mujeres «sepan rechazar estas situaciones y las denuncien», ya que en 2015 se mantuvo el dato de que el 80 por ciento de las mujeres asesinadas no había denunciado su situación.

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, planteó ayer la posibilidad de modificar los protocolos de protección de las víctimas de violencia de género para que la distancia con el agresor no pueda ser motivo de retirada de la vigilancia integral.

Así lo señaló en Zaragoza antes de participar en el acto de concesión del uso de la bandera de España a la Jefatura Superior de Policía de Aragón, donde se recordó a Soraya Gutiérrez.

En este sentido, el ministro reconoció que «todos aprendemos de los errores», por lo que subrayó que «todo lo que haya que reformar para erradicar esta lacra será bienvenido».

El presunto asesino, de 41 años, había aceptado una condena por sendos delitos de coacciones y amenazas contra la víctima de 8 y 6 meses de prisión, respectivamente, tras un juicio rápido que se celebró tras ser denunciado por la mujer hace 15 días. No entró en la cárcel porque carecía de antecedentes penales y en el juicio que se celebró reconoció los hechos por los que fue denunciado el pasado 5 de febrero por la ahora fallecida, informaron a Efe fuentes jurídicas. Se le condenó también a una orden de alejamiento de la víctima a más de 500 metros por cuatro años, así como a la privación de derecho y porte de armas.

Una persona, allegada de la víctima, ha asegurado que el asesino llegó a decir al hijo de la víctima, de 5 años, fruto de una relación anterior: «Me voy a llevar a tu madre a un viaje muy largo».