Agentes de la Comisaría de Policía Nacional de Elda-Petrer y de la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Alicante han desmantelado una plantación de marihuana -Cannabis sativa- en un chalé situado junto a un centro privado de educación infantil de primer grado en Petrer. De hecho, los alumnos y profesores de la guardería podían contemplar desde el patio las plantas -algunas de casi dos metros de altura- y percibir el fuerte olor que desprenden cuando se encuentran en un avanzado estado de floración.
La intervención policial se llevó a cabo el pasado martes, en una finca ubicada en la partida Almafrá Baixa, en Petrer, y finalizó con dos hombres detenidos, un eldense de 54 años y un albaceteño de 48, y la incautación de 60 plantas, 14 esquejes, un kilo de picadura de marihuana y casi tres kilos de cogollos.
Pero la investigación se inició semanas atrás gracias a la colaboración ciudadana. La Policía Nacional tuvo conocimiento de los hechos a través de un correo electrónico enviado a la dirección: «antidroga@policia.es». Un canal de comunicación que mantiene en contacto a los agentes con los ciudadanos y éstos, de forma totalmente anónima y confidencial, pueden facilitar cualquier información relativa al tráfico de sustancias estupefacientes. En este caso se recibió una información muy concreta sobre la existencia de un cultivo hidropónico en la finca intervenida.
Una vez en el interior de la propiedad, los agentes localizaron un sofisticado cultivo de marihuana dentro de una nave que disponía de dos cámaras de vigilancia que también han sido incautadas.
Los investigadores de la Policía Nacional también pudieron comprobar, en los días previos a la intervención, que la vivienda se ajustaba a las características de un lugar idóneo para ocultar cultivos de marihuana. Tanto por su ubicación alejada del tránsito de vehículos y personas como por su tamaño. Estas circunstancias fueron tenidas en cuenta por el Juzgado de Instrucción Número 1 de Elda para autorizar la entrada y registro del chalé, así como para el análisis de la información contenida en los dispositivos electrónicos hallados, y la inutilización de todos los aparatos destinados a la conservación y mantenimiento de la plantación. Entre ellos focos, transformadores, ventiladores y equipos de refrigeración y calefacción.
Peligrosidad
Este tipo de cultivos «indoor» de marihuana tan extendidos durante los últimos años son muy peligrosos. Especialmente cuando se encuentran en casas, pisos o chalés. Algo que es debido a la gran cantidad de productos químicos, fertilizantes y materiales volátiles que suelen ser mezclados de forma incorrecta por falta de conocimientos técnicos y que, unido a unas instalaciones eléctricas ilegales y precarias, pueden causar explosiones de cierta magnitud que afecten a los domicilios colindantes. Y en este caso, en concreto, el riesgo era todavía mayor al encontrarse la plantación de marihuana junto a una guardería a la que asisten numerosos niños de Elda y Petrer de 0 a 3 años.
