Alicante, capital europea de la «maría»

Querían «sembrar» la provincia de plantaciones de interior de marihuana para convertirla en la principal productora de Europa y distribuirla a nivel internacional. Con solo el material intervenido a la banda desarticulada por la Guardia Civil de Sant Joan pretendían plantar 80.000 ejemplares que habrían producido 10 toneladas de cogollos de «maría» al año.

Y para ello estos narcos contaban con avanzados conocimientos sobre electricidad. La red, destapada por la Benemérita en una operación en la que se han decomisado 8.000 plantas de marihuana en la comarca de l'Alacantí, tenía un método indetectable para defraudar a la compañía de la luz. Y sus enganches podían alcanzar un fraude de hasta 45.000 euros por plantación solo en electricidad.

La banda, compuesta por cinco holandeses y un marroquí que han sido detenidos en Alicante, La Nucía y El Campello, podría ser una de las mayores mafias de cultivo de marihuana establecida en Alicante y planeaban convertir la provincia en la principal productora de marihuana de Europa, según explicaron ayer desde la Comandancia de la Guardia Civil. La investigación, iniciada a raíz del hallazgo de una plantación abandonada de una vivienda de Mutxamel, llevó a los agentes hasta una de las naves de la organización, en un polígono industrial en La Nucía en la que se acumulaban miles de efectos para la instalación, montaje y preparación de cultivos «indoor» en viviendas.

Los agentes estiman que con lo almacenado en esa nave podrían haberse montado hasta 20 viviendas más como las encontradas en El Rebolledo (Alicante), Mutxamel y El Campello, casas en las que se intervinieron 8.000 ejemplares, por lo que han logrado impedir que se hubieran producido hasta 80.000 plantas al año, solo en esas viviendas. De esas plantas se hubieran conseguido más de 10 toneladas de droga al año.

Germinación y distribución

Esta organización tenía una singular especialización: en una de las viviendas se encargaban de germinar las semillas, en tiestos pequeños, y cuando llevaban a tener unos 5 cm eran distribuidas al resto de casas para continuar su desarrollo.

Una vez lista para el consumo, la droga se habría enviado al país natal de los cabecillas de la organización, Holanda, y también a países como Alemania y Bélgica, lo que hubiera posicionado a la provincia de Alicante como una de las principales proveedoras de marihuana del resto de Europa. De hecho, para facilitar su distribución, disponían de una máquina industrial para el corte, prensado y empaquetado de los cogollos en grandes cantidades.

Según explicaron desde la Comandancia de la Guardia Civil sobre esta banda, cuya desarticulación adelantó ayer este medio, uno de los detalles que más ha sorprendido a los agentes del puesto de Sant Joan ha sido la forma que tenían de conectar las viviendas al fluido eléctrico de forma ilegal. Para ello abrían un agujero en la acera, por las zonas de paso del cableado, conectando directamente la casa con las líneas de media y alta tensión, y volviendo luego a utilizar las mismas baldosas de la acera, de forma que nadie se percataba de esa conexión ilegal.

Ni siquiera los operarios de las empresas eléctricas, que observaban altos consumos en la zona, podían localizar el origen. Normalmente estos enganches fraudulentos se realizan a la red de baja tensión, pero no al cableado de media y alta tensión general, lo cual es mucho más complejo y peligroso, además de un enorme quebranto para la compañía eléctrica, de hasta 45.000 euros por plantación.

Los seis arrestados, cuatro hombres y una mujer holandeses y un marroquí de 46 años, han pasado a disposición judicial, ingresando en prisión los cinco hombres y quedando en libertad con cargos y prohibición de abandonar el territorio nacional la mujer.