La banda de los «aluniceros de la maza» detenida ayer de madrugada en la pista de Ademuz tras un tiroteo y una persecución por València está detrás de más de una decena de robos en establecimientos de lujo no solo del cap i casal -el golpe de ayer fue en la tienda de Louis Vuitton- sino también de otros municipios de la provincia, y tras su pista llevaban desde hacía meses tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil. Los tres detenidos, uno de los cuales resultó herido después de recibir un tiro durante la refriega con la Policía cuando huían del lugar del robo, son españoles y, al menos dos de ellos, tienen antecedentes.
Los hechos sucedieron pasadas las tres de la madrugada, cuando un vecino alertó al 112 después de ver a dos hombres con cascos de motorista cuando rompían a mazazos el escaparate de la tienda de Louis Vuitton, ubicada en el número 5 de la calle Poeta Querol, en el tramo conocido como la «milla de oro» valenciana.
Tres coches patrulla de la Policía Nacional llegaron justo cuando los ladrones salían ya del establecimiento, cargados con dos bolsas grandes de basura repletas de bolsos y complementos de la citada marca. Los ladrones entraron a toda velocidad en un Alfa Romeo -del que después se supo que estaba robado- en el que les esperaba un tercer compinche y, según al menos un testigo, los delincuentes, al ver llegar a los agentes, intentaron atropellarlos en la huida y llegaron a encañonarlos con un arma.
Los agentes respondieron tiroteando el vehículo, que aún así se abrió paso y emprendió la huida tomando varias calles en dirección contraria hasta salir a la pista de Ademuz, seguido de cerca por los tres coches policiales.
Cuando circulaban a la altura de Burjassot, uno de los coches patrulla tocó ligeramente la parte trasera del Alfa, que como consecuencia de los disparos se quedó sin luna posterior. El conductor del coche fugitivo perdió el control y, tras raspar la barrera externa de protección de la autovía, se giró en seco y quedó parado en mitad de la carretera, con el morro en contradirección. Un segundo vehículo policial topó entonces contra el Alfa, cerrándole toda posibilidad de huida.
El conductor, de 27 años, y el copiloto, de 46, salieron huyendo, pero fueron interceptados de inmediato por agentes de la Policía Nacional. El tercer implicado, de 34 años, se quedó inmóvil en el asiento trasero del vehículo, ya que estaba herido de gravedad, y fueron los demás agentes los que lo sacaron y esposaron, una vez tendido sobre el asfalto.
Evacuado al Hospital La Fe
Al darse cuenta de que sangraba, los policías pidieron una ambulancia de urgencia. Sanidad envió una del SAMU al lugar, que lo trasladó al Hospital La Fe, donde fue intervenido de urgencia. La bala, según el informe médico, le entró por el costado izquierdo -el proyectil entró por la parte central del maletero del Alfa-, atravesó el abdomen dañando el colon y se le quedó alojada en el muslo contrario. La herida es grave, pero no compromete la vida del presunto ladrón, ni tampoco su futura movilidad, ya que no ha afectado a la médula ni a puntos neurológicos importantes, según los médicos.
Los otros dos fueron trasladados al complejo policial de Zapadores, donde permanecen mientras se instruye el atestado policial. Ambos atropellaron el pasado 22 de octubre en València a un policía nacional que les dio el alto en la calle de la Paz. Se trata de Juan Carlos V. C., el copiloto del Alfa, que salió hace un año de prisión y sigue en libertad condicional por un homicidio cometido en 1999 en Cuenca relacionado con el tráfico de drogas. Pese a todo ello, el juez de guardia lo dejó en libertad. Tres días más tarde cometieron el siguiente robo.
