Hachís entre la arena. Durante una semana y media han aparecido en distintos puntos de la costa alicantina, hasta tres fardos de hachís que el mar había llevado hasta la orilla. Todos de ellos de unos treinta kilos de peso. Dos de ellos han aparecido en distintas playas de Alicante con apenas 24 horas de diferencia, mientras que el tercero fue localizado flotando en el agua frente a la costa de Dénia. Todo apunta a que los paquetes formaban parte de una carga mayor y debieron ser arrojados al agua por las personas que los transportaban. Por eso la Policía está investigando si existe algún tipo de relación entre los fardos, según han confirmado fuentes de la Comisaría Provincial.

El pasado 11 de agosto una embarcación localizó un paquete flotando frente a la costa de Dénia en el cabo de San Antonio y dio aviso a la Policía. Del mismo modo, el miércoles de esta semana un operario de limpieza municipal hacia de las cinco de la madrugada se encontró en la orilla otro fardo, cuando se encontraba removiendo la arena con el tractor en la playa de San Juan de Alicante, en el límite con la de Muchavista.

Para su sorpresa, este mismo operario encontró un segundo fardo en la playa de Urbanova apenas 24 horas después, tras haber sido enviado a trabajar a esa zona como refuerzo para reparar los daños causados por el temporal. Cuando vio el paquete en la arena, ya sabía qué era lo que había dentro. Este nuevo hallazgo se produjo en torno a las tres de la madrugada y, de nuevo, la Policía se ha hecho cargo de esta investigación.

Fuentes policiales indicaron que los fardos pudieron caer de la misma embarcación en alta mar durante la tormenta de la madrugada del miércoles y que con probabilidad fueron sorprendidos por la tormenta. Sin embargo, los fardos que han llegado hasta las dos playas de Alicante en los últimos dos días se encontraban muy deteriorados, mientras que el Dénia se encontraba en perfecto estado. La pregunta está en si se dañaron por la tormenta o porque cayeron al agua el mismo día que el fardo de Dénia. De hecho, los fardos hallados en las playas de Alicante tenían hasta moluscos adheridos. Los agentes están investigando la forma en la que el hachís se encontraba envasado a fin de determinar si toda esa droga que el mar ha escupido hacia la costa forma parte de un mismo alijo. Tampoco sería descartable que nuevos fardos pudieran aparecer flotando en cualquier playa.

No es la primera vez que algún fardo con droga acaba siendo localizado en la playa por algún bañista, bien en la orilla, bien en el fondo procedentes de algún desembarco fallido. En ocasiones, los narcos se ven obligados a lanzar su carga al mar cuando creen que corren el riesgo de ser sorprendidos por las Fuerzas de Seguridad. La Guardia Civil se ha hecho cargo también de los hallazgos de otros fardos de droga que fueron hallados en playas que correspondían a su jurisdicción. Las costas de la provincia han sido el objetivo de numerosos desembarcos de droga, aunque hoy día las redes de narcos intentan evitar este método, al considerar que son muy arriesgados. En uno de ellos pueden llegar una media de dos toneladas. En ocasiones se ha optado por pasar los fardos desde el norte de África a la península desde el Estrecho y posteriormente, éstos son distribuidos en distintas provincias españolas camufladas en vehículos.