La Sección Tercera de la Audiencia de Alicante ha confirmado una sentencia del Juzgado de lo Penal número 3 de Benidorm que condenaba a un año y tres meses de prisión a una pareja por haber demolido la casa familiar donde residía, en Alfaz del Pi, y que debía desalojar por orden judicial.

Cada uno de los condenados deberá pagar también una multa de 1.800 euros e indemnizar conjuntamente con más de 184.000 euros a los propietarios del inmueble -los padres y la hermana del hombre acusado- por los daños causados.

La resolución judicial, facilitada este miércoles por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), considera hechos probados que la pareja había sido condenada a desalojar la casa y la parcela donde vivía, pero el 8 de noviembre de 2016, antes del lanzamiento, contrató a una empresa que demolió el inmueble.

Aquel derribo ocasionó desperfectos por valor cercano a los 168.000 euros.

En el recurso de apelación, los condenados negaron haber tenido nada que ver con la demolición, aunque la Audiencia de Alicante indica que, tras la práctica de las pruebas, "se evidencia que la demolición se llevó a cabo en presencia de los acusados".

Además, señala que fue el hombre quien la solicitó a la empresa de derribos y presentó la solicitud al Ayuntamiento.

El acusado sostenía que la vivienda era de su propiedad, aunque la Sala considera probado que pertenecía a los padres y establece que el hecho de haber realizado mejoras en la construcción "no les legitima para proceder a su destrucción".