La Guardia Civil ha detenido en Ibi a tres personas -dos hombres y una mujer- por ocupar ilegalmente viviendas, una de las cuales utilizaban como almacén de objetos robados.

Según informa la Benemérita en un comunicado, los ahora arrestados habían usurpado una vivienda para vivir y otra para almacenar los objetos sustraídos en robos cometidos por viviendas de los alrededores. En la operación han sido incautados 158 kilos de cobre y 220 kilos de otros metales, así como multitud de herramientas sustraídas.

A finales del mes de abril, agentes del Área de Investigación de la Guardia Civil de Ibi detectaron un ligero repunte de robos cometidos en una zona muy focalizada del municipio.

Nada más comenzar las vigilancias, se dieron cuenta de que la mayoría de estos hechos delictivos se habían producido en los alrededores de una vivienda que resultaba estar ocupada por una pareja, y a la que solía acudir el hermano del hombre.

Tras varias semanas de seguimiento, corroboraron que la vivienda no solo la habían usurpado para residir, sino también para que hiciera las veces de "centro de operaciones de sus delitos", explica el Instituto Armado.

Desde este inmueble, accedían a otras dependencias limítrofes, como una fábrica en estado abandono, de donde sustrajeron herramientas y grandes cantidades de cobre, y a los patios interiores de otra vivienda, de donde sustrajeron tuberías de cobre y la grifería. Además, se constató que para almacenar y ocultar todo lo robado decidieron apropiarse de otra vivienda frente al domicilio.

Una vez los agentes obtuvieron indicios suficientes, se procedió a la entrada y registro del domicilio, lo que dio como resultado la aprehensión de 158 kilos de cobre y 220 kilos de otros metales, así como multitud de herramientas, procedentes de la citada fábrica.

La Guardia Civil procedió a la detención de estas tres personas como presuntas autoras de tres delitos de robo con fuerza y dos delitos de usurpación de vivienda.

La autoridad judicial decretó la libertad provisional sin fianza para todos ellos, con la obligación de comparecer los días 1 y 15 de cada mes y tantas veces como fueran llamados, además de la prohibición de salida del territorio nacional y de expedición del pasaporte.

La Guardia Civil destaca que uno de los detenidos posee multitud de antecedentes por delitos similares y que junto a su pareja "protagonizaron un hecho violento el pasado mes de febrero por el que, supuestamente, apuñalaron a un hombre, justo frente al domicilio que ocupan, creando así una gran alarma social y temor entre los vecinos".

Las investigaciones continúan abiertas, ya que se hallaron multitud de efectos que, "con toda probabilidad, provienen de robos anteriores pero hasta el momento no han sido reconocidos por los perjudicados", según la Benemérita.