Un agente de la Guardia Civil de Torrevieja que se hallaba en su casa con su hija de solo 9 meses ha sufrido contusiones leves al detener a un hombre al que sorprendió, supuestamente, cuando trataba de forzar la cerradura para entrar en su domicilio.

Sobre las 16.30 horas el agente, que se encuentra en buen estado de salud, escuchó un ruido extraño en la puerta de su vivienda y al asomarse por la mirilla observó que alguien trataba de manipular la cerradura desde el exterior.

Abrió la puerta con su bebé en los brazos y se identificó como agente fuera de servicio y, al verse sorprendido, el ladrón, con numerosos antecedentes y que posiblemente había tratado de robar en otras viviendas del edificio, emprendió la huida iniciándose una persecución a pie.

En el trayecto, encontró a unos obreros que trabajaban en un edifico colindante a su vivienda, a quienes tendió al bebé para continuar con la carrera tras el autor, un hombre de 54 años y nacionalidad francesa.

En el momento de darle alcance, el desconocido se resistió a ser atrapado lanzando patadas y puñetazos y sacó unas tijeras que llevaba ocultas bajo la ropa, con las que probablemente forzaba la cerradura, para tratar de clavarlas en el agente antes de meterse en una finca cercana.

Tras avisar por teléfono, varias patrullas acudieron al lugar y se detuvo al supuesto ladrón escondido bajo un seto, quien tras pasar a disposición judicial quedó en libertad con cargos.