El Equipo ROCA de la Guardia Civil de Calp ha desmantelado dos grupos de ladrones que operaban en la Marina Alta y Baixa, uno de ellos implicado en 42 robos en viviendas y obras en construcción y el otro acusado de sustraer 3,6 toneladas de aguacates, según informó ayer la Comandancia de Alicante. En la operación contra los robos en casas, el Equipo Roca de Calp, especializado en delitos cometidos en el ámbito rural, detuvo a tres personas e investigó a dos más por sustraer efectos valorados en unos 60.000 euros, mientras que por los robos de aguacates en la zona de Callosa d'en Sarrià y Polop, valorados en más de 12.000 euros, imputaron a cinco personas, las cuales declararon en calidad de investigadas pero sin llegar a ser arrestadas.
La operación contra los ladrones de casas, especializados en robar bicicletas y herramientas que luego vendían en rastros y mercadillos de la provincia, permitió a la Guardia Civil el esclarecimiento de 42 delitos de robo con fuerza y hurtos cometidos en viviendas de urbanizaciones aisladas y obras en construcción de Calp, Benissa, Moraira, Altea y Callosa d'en Sarrià.
Los ladrones aprovechaban las horas de menos tránsito de los residente para acceder al interior de las casas. Una vez dentro sustraían objetos que pudieran tener una salida fácil en el mercado, como todo tipo de herramientas y bicicletas, las cuales eran sustraídas incluso escalando por fachadas para llevárselas de los balcones.
La Guardia Civil averiguó que la mercancía sustraída era vendida días más tarde en rastros de segunda mano de las dos Marinas, donde los sospechosos no los exponían al público, sino que los escondían en un baño de minusválidos del que tenían la llave e iban sacándolos cuando tenían comprador.
Una vez identificados los implicados la Guardia Civil detuvo a dos hombres y una mujer, pertenecientes a un mismo clan familiar, e imputó a dos personas más.
Buena parte de los efectos robados fueron recuperados por la Guardia Civil en diferentes actuaciones llevadas a cabos en mercadillos y devueltos a sus legítimos propietarios.
En la segunda intervención del Equipo ROCA de Calp fueron investigadas cinco personas por el robo de 3.600 kilos de aguacate.
Las pesquisas de la Guardia Civil se iniciaron el pasado septiembre y situaron a los autores en el municipio de Polop de la Marina.
Desde Polop se trasladaban en furgonetas a los campos de cultivo de aguacate, donde rompían las verjas o saltaban para robar el fruto de los árboles.
Los aguacates eran trasladados en las propias cajas que el agricultor tenía en el campo. Una vez consumador el robo llevaban los aguacates a una finca y allí la ocultaban hasta su distribución posterior en el mercado negro.
Los cinco investigados han sido acusados de cinco robos en los que se apoderaron de las 3,6 toneladas de aguacate, cuyo valor supera los 12.000 euros.
