Un hombre arremetió el pasado sábado contra una enfermera en el Hospital de la Ribera tras el fallecimiento de un familiar y la arrastró del pelo por los pasillos de Urgencias. Los violentos hechos ocurrieron el pasado sábado. Según fuentes internas del centro asistencial alcireño, al conocer el fallecimiento de su familiar, el hombre se dirigió hacia la enfermera que se encontraba en la zona de triaje, la agarró del pelo y la arrastró varios metros por el suelo del área de Urgencias.

Las mismas fuentes explicaron que el agresor reconoció, acto seguido, que no había actuado correctamente y pidió disculpas a la sanitaria, que no sufrió lesiones de relevancia.

Con todo, el comité de empresa del hospital ha denunciado públicamente los hechos y se produjo una concentración de rechazo a las puertas del servicio de Urgencias. Asimismo, alertaron que este tipo de conductas violentas contra los sanitarios son cada vez más frecuentes «en todo el Departamento de Salud de la Ribera».

«Hacemos un llamamiento a la ciudadanía para indicar que los trabajadores no somos responsables de las limitaciones que tiene el sistema, tanto en medios como en recursos humanos. Estamos viviendo tiempos difíciles por todo lo relacionado con la pandemia y pedimos colaboración en vez de confrontación», manifestó el colectivo que representa a los trabajadores.

Saturación en Urgencias

Según ha podido saber este medio, el fallecido en cuestión entró directamente en la sala de reanimación, al igual que otras diez personas en dicha jornada, una cifra inusualmente elevada que se suma a la saturación que padecen las Urgencias.

«De esos once, tres perdieron la vida. Quizás, en otro escenario también habrían muerto. Pero son muchos los profesionales que tienen la sensación de que están desbordados y que, aunque hacen todo lo que pueden, no alcanzan a ofrecer la asistencia que el paciente se merece», añadieron las fuentes consultadas. Además, insistieron en que el temor es cada vez mayor ante el escenario que pueda venir «con patologías crónicas que se han agravado durante la pandemia, rebrotes de coronavirus y el repunte asistencia típico de la gripe». Su resumen es sencillo: «Puede ser un caos».