La Fiscalía mantuvo ayer su petición de condena al acusado de abusos sexuales a un menor de 13 años que acogió en su casa de Alicante durante un programa de vacaciones para niños saharauis que necesitan ayuda médica, aunque rebajó de cuatro a tres años de cárcel la pena solicitada. Por el contrario, la defensa solicitó la libre absolución del acusado, quien se ha declarado siempre inocente.

El juicio, que quedó ayer visto para sentencia en la Sección Tercera de la Audiencia de Alicante, se ha celebrado esta semana por segunda vez después de que el Tribunal Supremo estimara el recurso de la defensa por indefensión y anulara la anterior vista porque no se permitió que declarase el menor que denunció los abusos.

Este joven, que ahora es mayor de edad, sí ha declarado en el segundo juicio y ha manifestado que no fue víctima de tocamientos con ánimo libidinoso por parte del acusado.