La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a los dos acusados de asesinar a pedradas a un vecino de Orihuela a mediados de julio de 2017 en la inmediaciones de la desembocadura del río Andarax en Almería y ha impuesto 14 años de prisión a Manuel J.C., quien reconoció los hechos en sala, y a 18 años de prisión a la coacusada Concepción M.G., quien se desligó del crimen pero que, según el jurado, fue la autora de la primera pedrada.

El fallo de la Sección Tercera de Almería condena además a los acusados a indemnizar al hijo y madre del fallecido con una cuantía de 200.000 euros, conforme a lo solicitado por la acusación particular y la Fiscalía, que de otra parte, interesaban 20 años de cárcel para la acusada.

El magistrado considera adecuada la pena de 18 años de cárcel para la acusada ante el mecanismo «agresivo» empleado para provocar la muerte de la víctima y ante el «sufrimiento» que causó a la misma y a sus familiares, ya que estuvo más de un año desaparecido escondido bajo un colchón y la Guardia Civil de Alicante lo encontró.

El jurado popular determinó que ambos acusados se encontraban con la víctima, apodada «El Chiquitín», en una chabola ubicada en un descampado del barrio de El Zapillo (Almería), cuando la acusada, «con la intención de causarle una muerte cierta, sorpresivamente y por detrás», le golpeó con una piedra en la cabeza cuando estaba sentado en el suelo. Así, con esa misma intención y encontrándose el perjudicado indefenso y sin poder repeler la agresión, ambos acusados continuaron con la agresión y dieron varios golpes con piedras en la cabeza a la víctima, quien falleció por un traumatismo craneoencefálico.