Una bebé de tan solo dos meses ingresó el pasado sábado en el hospital Materno-Infantil de Zaragoza después de que sus padres refirieran que la menor lloraba desconsoladamente cuando le tocaban una de las piernas y que estaba inflamada. El examen posterior realizado por los facultativos ha derivado en la detención de los progenitores como supuestos autores de un delito de lesiones graves en el ámbito familiar.

La detención de los padres, V. R. D. R. y V. P. M., de 31 y 27 años, de origen español y sin antecedentes policiales ni penales, se produjo después de que el centro hospitalario activara el protocolo de posible maltrato, dando aviso de ello al Juzgado de Instrucción número 12 de Zaragoza, que ese día se encontraba en funciones de guardia. Su titular, el magistrado Alfonso Tello, mandó al Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón que procediera al arresto de la pareja tras recibir el informe médico de la menor.

En él, según fuentes consultadas por El Periódico, los sanitarios que atendieron a la bebé hicieron constar que presentaba cinco fracturas óseas en las extremidades inferiores, una fractura subaguda en la clavícula derecha y dudosas fracturas en la quinta y séptima del arco costal. Asimismo, añadieron como "posible" una lesión antigua en la cabeza.

Por todo ello, los agentes acudieron por la noche al domicilio familiar, en el zaragozano barrio de Las Fuentes, para proceder a la detención de ambos, quienes no mostraron ningún tipo de resistencia. Ante los investigadores, la pareja negó haber maltratado a la niña y afirmaron que los días previos estaban sometiendo a la menor a una serie de masajes para mejorar el tránsito intestinal de la niña. También tomaron declaración como testigo a la abuela, quien aseguró que es una pareja normal, sin problema alguno de convivencia y que la primera extrañada por todo lo que estaba aconteciendo era ella. Las pesquisas continúan abiertas.

Esta investigación se produce cuando todavía están sin juzgar la madre de una niña de 4 años y su actual pareja como presuntos responsables de la graves lesiones con las que ingresó en la uci del hospital Materno-Infantil de la capital aragonesa. La titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Zaragoza decretó el ingreso en prisión de la mujer, C. M., de 30 años, y de su novio, E. Y. L, de 35 años, donde permanecen en la actualidad.

En un principio, ambos negaron haber agredido a la menor e insistieron en que esta había sufrido un accidente. Sin embargo, uno señaló que la chica se cayó de la cama el otro dice que fue en la bañera. La menor permaneció ingresada varios meses como consecuencia de las lesiones que sufrió en el interior de la vivienda familiar, en el zaragozano barrio de El Gancho. En este caso, todavía no hay escrito de acusación del ministerio público.