Dos menores tutelados por el Govern acumulan 28 condenas por robos con fuerza y atracos violentos en Palma. Los jóvenes están cumpliendo tres y ocho años de internamiento respectivamente por su abultado historial delictivo. Acaban de ser condenados otra vez por desvalijar dos viviendas de la ciudad con una semana de diferencia, aprovechando que se habían fugado de es Pinaret.

Los dos chicos, que acaban de alcanzar la mayoría de edad, comenzaron a delinquir cuando tenían 14 años. Desde entonces y tras sus primeras condenas en los juzgados de menores han estado recluidos en el centro de internamiento en régimen semiabierto, por lo que podían salir para llevar a cabo diversas actividades educativas o laborales, y estaban bajo la tutela del Govern.

Sin embargo, los dos jóvenes han continuado cometiendo gran cantidad de hurtos, robos y atracos, muchas veces juntos. Uno de ellos acumula 20 sentencias condenatorias por robos con fuerza y otras tres por atracos, por los que cumple ocho años de internamiento. El otro ha sido condenado seis veces por los mismos delitos y está cumpliendo tres años de reclusión.

Los dos acusados lograron hacerse con un botín de más de 5.000 euros en uno de los inmuebles

Su última condena en los juzgados de menores acaba de ser confirmada por la Audiencia Provincial de Palma. Los dos acusados volvieron a fugarse de es Pinaret para cometer dos robos en viviendas. El primero, el 13 de febrero de 2019, cuando se colaron en un domicilio de la ciudad aprovechando que la puerta de entrada estaba abierta. De allí se llevaron 350 euros en metálico y un reloj valorado en otros 90.

Una semana más tarde actuaron otra vez. En esta ocasión saltaron varios muros para acceder a un inmueble. Destrozaron un armario para hacerse con una caja fuerte en la que según la víctima había 4.500 euros, pero cuya existencia no considera probada la sentencia. Se llevaron también varias joyas valoradas en más de 5.000 euros y un teléfono móvil. Parte del botín pudo ser recuperado.

Otros ocho meses de reclusión

Por estos dos robos, el juzgado de menores número 2 de Palma declaró a los jóvenes autores de un delito de robo en casa habitada y otro de hurto con la agravante de multirreincidencia por su largo historial delictivo. Por ellos les impuso otros ocho meses de internamiento en régimen cerrado y otros tres meses de libertad vigilada.

Además, condenó a los chicos, sus padres -que mantenían la patria potestad- y el Govern a indemnizar a uno de los perjudicados con 5.725 euros y al otro con 350 euros por el dinero y las joyas robadas que no han podido ser recuperadas.