Agentes de la Policía Nacional han detenido a 23 integrantes de un grupo u organización criminal que se dedicaba a la comisión sistemática de delitos de falsedad documental y contra los derechos de los ciudadanos extranjeros, de una manera concertada y con reparto de funciones, desde hacía varios años, según fuentes policiales. La organización venía dedicándose desde finales de 2018 a falsificar cartas de identidad de países de la Unión Europea para vendérselas a extranjeros de terceros países, con el fin de documentarlos de forma fraudulenta en España como ciudadanos comunitarios y ponerlos luego a trabajar en diferentes empresas agrícolas. Además, así les ayudaban a permanecer en España de forma ilegal e inadvertida, vulnerando la legislación sobre estancia de extranjeros en el país.
Durante la investigación se detectaron más de 50 extranjeros que, con cartas de identidad falsas de la República Checa, Bulgaria, Rumanía y Lituania, conseguían asignaciones de Número de Identidad de Extranjeros (NIE) y regularizarse como europeos de forma fraudulenta, en las oficinas de documentación de Dénia, Benidorm, Alicante y Alcoy, así como en las de Hellín (Albacete) y Yecla (Murcia). Posteriormente ellos usaban esos documentos falsos para ser dados de alta en diferentes empresas agrícolas.
Para la comisión de estas infracciones, existía un reparto de funciones entre los integrantes de esta trama criminal. Unos captaban a los extranjeros, tanto en España como en otros países. Otros facilitaban sus regularizaciones en España como ciudadanos comunitarios, preparando sus solicitudes de NIE, reservando las citas en las oficinas y gestionando la presentación de esas peticiones en ellas. Un tercer nivel de especialización estaba compuesto por los intermediarios laborales, capataces o jefes de cuadrilla, que abusaban de su condición de encargados en diferentes empresas agrícolas para incluir en sus equipos a personas con identidades falsas. Y, por supuesto, los falsificadores, que hasta el momento no han sido localizados, por lo que se continúan realizando gestiones.
En la fase final de esta investigación se desarrolló un operativo conjunto entre todas las unidades intervinientes, actuando de forma simultánea en las localidades de Algemesí y Alzira, en Valencia, y Nules y Almenara Playa, en Castellón. El resultado fue la detención de 23 ciudadanos extranjeros, dos de ellos mujeres y 21 hombres. Nueve son de nacionalidad búlgara, siete de Moldavia, cuatro de Ucrania, dos de Lituania y uno de Rumanía.
En la investigación participaron conjuntamente policías pertenecientes a la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Valencia y sus homólogos de las Comisarías de Dénia y Benidorm, teniendo un desarrollo total de ocho meses de operativo. Los detenidos fueron puestos a disposición del juzgado de Instrucción de Guardia de Dénia.
