Investigación

Sandra Bermejo, la desaparecida en Asturias, "había dejado los grupos esotéricos", según su familia

La mujer había probado en el pasado la droga ayahuasca "pero con fines de experimentación forense y luego se alejó de esos círculos"

Sandra Bermejo García.

Sandra Bermejo García.

Francisco L. Jiménez

La última hipótesis difundida sobre qué pudo haberle pasado a Sandra Bermejo García, la psicóloga madrileña de 32 años afincada en Gijón que desapareció en el cabo Peñas (Asturias) el pasado 8 de noviembre, apunta a que un "accidente" durante un ritual esotérico con ingesta de la droga psicodélica conocida como ayahuasca puso ser fatal. Esta teoría se basa en el rastro que la propia interesada dejó en sus redes sociales, donde escribió sobre su incursión en grupos donde se consume esa sustancia originaria de la medicina de algunos pueblos indígenas de Sudamérica.

La familia de la desaparecida confirmó a La Nueva España, del grupo Prensa Ibérica, que, efectivamente, Sandra Bermejo tuvo contacto con la ayahuasca y con personas familiarizadas con su uso, pero seguidamente aclaran los motivos para evitar "dolorosas especulaciones": "Sandra, en el ámbito de su profesión (estudió Psicología, trabaja como terapeuta y se especializó en el terreno de la psicología forense) es tremendamente inquieta y le mueve el afán de explorar más allá de límites convencionales. Es una mujer abierta a explorar distintas terapias alternativas con tal de ayudar a personas a las que no le han funcionado las convencionales. El episodio de la ayahuasca es cierto, les dijo incluso a sus padres que iba a probarla, como les decía todo lo relacionado con su vida. Es decir,

"A la familia no nos pilla de sorpresa esa relación de Sandra con lo esotérico y con la ayahuasca en concreto porque no es un secreto, ya lo sabíamos"

Portavoz de la familia de Sandra Bermejo

El portavoz familiar considera que la relación de Sandra Bermejo con el esoterismo o las experimentaciones con sustancias psicodélicas "forman parte de la esfera de lo privado y no tenían por qué haber salido a la luz pero ya que ha trascendido, que sea con la verdad".

Y la verdad, según el portavoz familiar es esta: "Hace un tiempo, antes de irse a vivir a Asturias, quiso experimentar con la ayahuasca para saber lo que es". Se trata, en realidad, de una bebida alucinógena, elaborada con plantas y utilizada por chamanes del Amazonas desde tiempos ancestrales.

"Según los iniciados, te ayuda a conocer tu interior, a enfrentarte a tus traumas y saber enfocarlos de manera que puedas superarlos". Así que ella, prosigue el familiar, "la probó para ver cómo funcionaba, con un fin forense y terapéutico. Y tras hacerlo no volvió a tomarla porque, por lo que sea, la experiencia no le resultó satisfactoria y se desvinculó de ese grupo en septiembre de 2021".

La "experimentación clínica" de Sandra Bermejo con la ayahuasca tuvo lugar, siempre según el portavoz familiar, "en un centro de referencia en Madrid". En los retiros que allí se organizan los participantes "están acompañados por un psicólogo y un médico, además del chamán". Es decir, "era algo profesional, muy alejado de lo que pueda ser una secta. No quedó con cuatro colgados".

Los familiares de la desaparecida en Peñas no dan, por tanto, mucha verosimilitud a la hipótesis de un ritual esotérico en el que "algo salió mal" y confían en que el trabajo policial, que sigue adelante aunque con pocos resultados, dé sus frutos y permita hallar a Sandra Bermejo, incluso viva según la esperanza que tienen los allegados de la mujer.

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