Agentes de la Policía Nacional han detenido en Alicante a una española de 30 años por robar joyas de distintas viviendas en las que trabajaba como cuidadora de personas mayores, ha informado la Comisaría Provincial. La investigación se inició a raíz de una denuncia por la desaparición de dos piezas de oro de un domicilio. Las víctimas sospechaban de la mujer que trabajaba cuidando a su padre.

Los investigadores empezaron a hacer gestiones con casas de compra-venta de joyas, comprobando que la sospechosa había realizado un total de 31 ventas de joyas en un periodo de un año. Entre ellas, las dos piezas de oro denunciadas por los perjudicados, circunstancia que hacía sospechar a los investigadores que todas ellas podrían tener una procedencia ilícita. Los agentes analizaron la vida laboral de la cuidadora y averiguaron que había estado trabajando en varias residencias de personas mayores como gerocultora, así como en varios domicilios particulares de personas dependientes.

Los policías pudieron determinar que en la mayoría de los centros y hogares donde había estado trabajando esta mujer, también habían desaparecido joyas de las personas a las que cuidaba. Todas las víctimas se trataban de personas mayores dependientes, a las que sustrajo piezas de oro al descuido. Incluso arrancándosela del cuello mientras les vestía y les aseaba. Los agentes la localizaron y la arrestaron como presunta autora de varios delitos de hurto y robo con violencia. Los agentes han conseguido atribuirle hasta seis robos diferentes.

La sospechosa fue puesta a disposición del juzgado de guardia de Alicante. La investigación fue llevada a cabo por agentes del Grupo Operativo de Policía Judicial de la Comisaría de Policía Nacional del Distrito Centro de Alicante. Por su parte, la Policía continúa con las gestiones para localizar a más posibles víctimas de estos robos.

Robo de electrodomésticos

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Por otro lado, la Policía ha detenido a otras dos personas más por robar electrodomésticos a la persona a la que una de ellas cuidaba. Los arrestos se practicaron el pasado mes de septiembre. Una de las mujeres residía en el domicilio realizando labores de cuidadora de un hombre mayor y, cuando éste cayó enfermo, fue trasladado a una residencia. Los familiares informaron a la cuidadora de que ya no seguiría trabajando para ellos, por lo que tenía que abandonar la vivienda.

En el momento en que se marcharon de la casa. la mujer aprovechó que el propietario ya no estaba en la casa para, ayudada por otra persona, sustraer varios electrodomésticos valorados en 3.500 euros. Ambos fueron detenidos como presuntos autores de un delito de hurto y puestos a disposición del juzgado de guardia de Alicante.