El juez que investiga un presunto laboratorio de billetes falsos de 500 euros en La Nucía busca una partida de cerca de una tonelada de peso de papel de seguridad que la red importó de China y que serviría para llevar a cabo las falsificaciones. Para localizar este material, así como las planchas con las que se pudo imprimir el dinero, ha ordenado varios registros que se han llevado a cabo en domicilios y empresas vinculados al presunto cerebro de la red, aunque en ninguno de ellos ha podido encontrarse el material buscado. Unas pruebas con las que pretendería vincular a los detenidos con los 4,3 millones en billetes falsos hallados en una mochila en un paraje boscoso de Barcelona en agosto de 2021, así como evitar que la red pueda seguir falsificando dinero.

En el auto por el que se han ordenado los nuevos registros, el juez considera imprescindible la localización de una tonelada de papel de seguridad anti-falsificación con marca de agua procedente de China, con el que la red pretendía seguir fabricando billetes, así como unas planchas metálicas que habría fabricado el investigado, y otro material susceptible de haber sido empleado en la elaboración de los billetes de 500 euros. 

Los investigadores sospechan que Tomás M. J. habría estado utilizando a personas de su entorno para no tener contacto con otros miembros de la red y tratar de burlar a las Fuerzas de Seguridad. Por este motivo, se ordenaron cuatro registros en Altea y la localidad valenciana de Picassent, a fin de encontrar el material desaparecido. Uno de los temores de los investigadores es que la red pretenda deshacerse de este material para tratar de eliminar pruebas que les incriminaran con la mochila hallada en Barcelona. Según la causa, las huellas en el dinero encontrado en dicha mochila es la principal prueba contra los ahora detenidos.

Concretamente, los registros se autorizaron en locales comerciales de personas cercanas al acusado, su pareja sentimental y sus padres. Por este motivo, esta semana las Fuerzas de Seguridad han estado en Altea y Picassent a la búsqueda de un material que sería crucial para la imputación de los acusados.

Las defensas se han encargado de recalcar que por el momento el juzgado ha encontrado maquinaria de impresión, pero ninguna prueba de que esos aparatos hayan sido utilizados para la fabricación de billetes.

Importaciones de China

El sumario apunta a que la red se abastecía en China de los útiles necesarios para la fabricación de los billetes. Durante los meses de la pandemia, su actividad quedó bloqueada porque con el cierre de fronteras, se les cercenó también el acceso a las materias primas. Los investigadores apuntan a que en los últimos meses esta situación había cambiado y de hecho habían comprado una gran cantidad de papel que les permitiría imprimir los billetes.

De hecho, sospechan que con ese mismo material se imprimieron los billetes que se localizaron dentro de la mochila. El dinero estaba sin acabar y faltaban que se le añadiera una serie de marcas que le hubieran hecho muy difícil de distinguir de los auténticos. Sin embargo, el papel usado para imprimirlos no era todo el que habían importado desde la potencia asiática. La causa apunta a que todavía podrían contar con hasta una tonelada de papel que podría estar oculta en cualquier parte, esperando a poder ser utilizada de nuevo. O bien poder ser destruidas antes de que den con ella las Fuerzas de Seguridad.

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Pendientes del traslado a la Audiencia Nacional

Los nuevos registros domiciliarios se han ordenado cuando todavía está pendiente la decisión del traslado de la causa a la Audiencia Nacional. Tanto la Fiscalía como alguna de las defensas, en concreto el abogado Francisco González que representa al presunto cabecilla, han planteado que la causa corresponde a los juzgados Centrales de Instrucción porque son los competentes para los delitos de falsificación de moneda y por tratarse de un delito que afectaría a distintas provincias españolas, concretamente Alicante, Barcelona, Valencia, Málaga, Teruel y Málaga. Los registros con los que comenzó la operación se llevaron a cabo el pasado septiembre.