Resignados al litigio

Desde el año pasado, la Conselleria de Justicia lanzó un programa pionero apostando por la mediación como forma alternativa para resolver conflictos. Un sistema que huye de los vencedores y vencidos y de la combatividad del litigio, buscando que sean las partes quienes negocien la solución. Los juzgados de Alicante derivaron 437 asuntos a mediación, la cifra más alta de la Comunidad, pero solo se cerraron una veintena de acuerdos.

Otra manera de resolver los conflictos, con un menor desgaste económico y evitando trasmitir la sensación de que hay ganadores y perdedores. Bajo esta premisa, la Conselleria de Justicia tratando de potenciar los servicios de mediación a través de un sistema pionero que busca evitar la judicialización de los conflictos y que las partes puedan llegar a ser capaces de encontrar un acuerdo que sea satisfactorio para ambos y con la ayuda de un mediador. En estos momentos, la provincia de Alicante está a la cabeza en cantidad de casos derivados a mediación por los juzgados en la Comunidad Valenciana. Del total de los 675 asuntos que los jueces derivaron a la mediación en la Comunidad, un total de 437 correspondían al Servicio de Orientación y Mediación (SOM) en la provincia de Alicante. Aunque el porcentaje de acuerdos todavía sigue siendo bajo. Menos de un centenar aceptaron la mediación y en poco más de una veintena de casos se llegó al acuerdo. Fuentes de la Conselleria de Justicia valoraron que una vez que se acepta la mediación, cerca de un 40% sí que consigue llegar a un acuerdo. La Audiencia de Alicante ha apostado por este sistema y ha ayudado a la Conselleria en poner en marcha toda la infraestructura. Su presidente Juan Carlos Cerón confía en que con el tiempo las cifras de acuerdos mejoren.

Aun así, los expertos lamentan que la cultura de mantener el litigio hasta el final todavía sigue presente en buena parte de la sociedad, sin ser del todo conscientes de que a veces lo importante no es solo una sentencia, sino que las partes consigan arreglar su conflicto con la ayuda de un mediador. Todavía faltan por contabilizar los datos de otros servicios de mediación que se están poniendo en marcha a través de los ayuntamientos, apoyado en buena parte en lo que antaño eran los juzgados de paz, y para los que la Administración autonómica tiene en marcha una línea de ayudas. Unas cifras que podrían apuntar a si verdaderamente la cultura de la mediación se abre camino.

Divorcios y herencias

En estos momentos, la mayor parte de los procedimientos que más se están derivando desde el SOM hacia la mediación son aquellos derivados de los pleitos de Familia, como Divorcios, medidas cautelares sobre los hijos; pero también cuestiones de herencias, delitos leves, como injurias y calumnias y estafas. Son asuntos que previamente ha seleccionado el magistrado y ha visto la posibilidad de que se puede evitar el juicio llegando a un acuerdo entre las partes. Muchas veces la mediación conlleva un menor desgaste emocional en asuntos donde los ánimos están muy enconados y se depende más de que las partes se sienten a hablar, que de cualquier solución jurídica.

«Hemos tenido casos donde tras la mediación no se llegó a ningún acuerdo, pero se avanzó tanto en las negociaciones que a la hora del juicio las partes pudieron llegar a una conformidad», explica a este diario la Letrada de la Administración de Justicia Alicia Juan Lledó, que junto a la funcionaria Maria Ángeles Lloret está al frente de la oficina. Desde estas dependencias se designa al mediador de un listado de profesionales que está a disposición del juzgado y es éste quien se encarga de buscar el acuerdo. Una vez cerrado, lo pactado vuelve al juez para homologar el acuerdo, aunque también puede hacerse ante notario a través de un escritura pública.

Uno de los asuntos donde apenas se están recibiendo asuntos para mediación son los pleitos por pequeños accidentes de tráfico, a pesar de tratarse de procedimientos que perfectamente podrían ser susceptibles para alcanzar acuerdos al margen de los tribunales. Sin embargo, las propias compañías de seguros son las primeras que no están interesadas y prefieren apurar hasta el final. Entre los delitos que están expresamente excluidos de la mediación se encuentra la violencia de género. 

Relación con los abogados

José Llobregad Espuch, mediador y delegado del ICALI (Colegio de la Abogacía) en Villena, señala que «los mediadores no quitamos trabajo a los abogados, ellos también son necesarios en el proceso». En su opinión, una de las claves para el éxito de una mediación es la voluntariedad. La imposición o un mal acuerdo puede ser fuente de conflictos futuros. Y sobre todo, recalca que lo que pasa en el despacho del mediador se queda en el despacho del mediador.

«Es importante la confidencialidad de lo que allí se hable. Los mediadores no somos testigos en un juicio», señaló. Por eso tiene claro que el mediador debe ser neutral e imparcial, para lo que a veces solo conoce los datos esenciales del procedimiento, a fin de no hacerse ideas preconcebidas. Al final muchas veces lo que subyacía en el fondo del conflicto era la necesidad de que a las partes se les deje exponer su punto de vista.

Contacto

El Centro de Mediación es el órgano encargado de fomentar y facilitar el acceso a este nuevo sistema en la Comunidad Valenciana. Para llevar a cabo estas tareas, la Generalitat ha puesto en funcionamiento en una primera fase el Servicio de Orientación y Mediación (SOM) en las sedes judiciales de Alicante, Elche, Castellón y València. A ellas se podrá dirigir la ciudadanía en caso de precisar cualquier información relacionada con la mediación.

En Alicante, la oficina del SOM se encuentra en la planta baja del Palacio de Justicia de Pardo Gimeno, 43 y el teléfono de contacto es el 966902520/521. La dirección de correo electrónico es mediacio_alacant@gva.es.

En Elche, el SOM se encuentra en la cuarta planta de la Ciudad de la Justicia en la calle Abogados de Atocha, 41. El teléfono es el 966917563 y el correo electrónico mediacio_elx@gva.es.