Dos detenidos por un asesinato ya juzgado en Alicante tras la carta de un preso a la Policía

La investigación del asesinato de Pedro J., un hombre de 80 años que fue estrangulado en el barrio de Babel en Alicante en junio de 2019 para robarle un anillo y una cadena, hechos por los que la Audiencia ya condenó a 20 años de prisión a Tibi M., de 31 años y nacionalidad rumana, ha dado un giro inesperado tras la confesión de un preso que compartió celda con el interno que cumple condena por este crimen. La Policía Nacional de Alicante pudo identificar y detener a dos implicados más, uno de los cuales era menor de edad cuando se cometió el crimen y ha sido apresado en las Islas Vírgenes de los Estados Unidos, en el Caribe. El otro sospechoso, de 26 años en la actualidad, fue apresado en Granada por los agentes del Grupo de Delincuencia Violenta de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante.

Los dos arrestados son familiares del condenado por el crimen y tienen residencia en Granada, donde la Policía Nacional les tenía fichados como integrantes de un grupo de carteristas que roba en la capital granadina.

Los investigadores de la Policía alicantina, que ya advirtieron en el juicio que el crimen fue cometido por al menos dos personas, lograron reconstruir lo sucedido y comprobaron que el relato recogido en una carta que les envió un preso que compartió celda con el condenado por el crimen se ajustaba a la realidad y no era descabellado.

La maquinaria judicial se activó tras la carta de un preso recibida por la Policía Nacional tanto en el juzgado de Instrucción número 3 de Alicante, que llevó el caso del estrangulamiento del octogenario, como en un juzgado de Menores dada la edad de uno de los implicados en el momento del crimen, 17 años. Fuentes cercanas al caso han explicado a este diario que en la carta se explicaba cómo ocurrió el crimen y la participación de otros implicados, todo ello relatado al autor de la misiva por su compañero de celda.

El único condenado hasta ahora, Tibi M., negó en el juicio celebrado en octubre de 2021 que matara a Pedro J. y solo admitió que estuvo en el domicilio, aunque en el turno de última palabra desveló que vio llegar a un desconocido a la casa de la víctima cuando él se estaba marchando. Su versión no fue creída por el jurado popular, que le declaró culpable de asesinato y robo con violencia.

Los investigadores del Grupo de Delincuencia Violenta pudieron poner nombre y apellidos a los otros implicados a los que se hacía referencia en la carta del preso. Los agentes se trasladaron de Alicante a Granada e inicialmente pudieron apresar el pasado octubre a un joven de 26 años, primo del condenado. Fue encarcelado tras pasar a disposición judicial, pero recientemente quedó en libertad provisional tras descartarse que un perfil genético hallado en la vivienda fuese de él.

De Rumanía al Caribe

El otro implicado, que actualmente tiene 20 años y también es primo de los anteriores, viajó recientemente de Rumanía a las Islas Vírgenes de Estados Unidos, en el Caribe, y fue detenido tras dictar un juzgado de Menores una orden internacional de detención. Ahora se está pendiente de su extradición y cuando llegue a España se cotejará su ADN con el perfil genético que la Policía recogió en casa de la víctima.

La víctima vivía en Leganés pero tenía una segunda residencia en Alicante y vino en junio de 2019 para disfrutar de las fiestas de Hogueras. Según la sentencia, solía pasear desde su casa en la avenida Alcalde Lorenzo Carbonell hasta el Postiguet, donde contactó con el ahora condenado y con otra persona sin identificar, a los que llevó a su domicilio el 21 de junio. La sentencia declara probado que una vez dentro ambos se abalanzaron sobre la víctima con la intención de amordazarle, llegando a golpearle. Los atacantes le causaron la asfixia al romperle un cartílago mientras estaban encima de él para maniatarle. El cadáver fue hallado el 29 de junio al recibir la Policía la llamada de sus familiares, que estaban preocupados.