Prisión para el presunto cerebro del secuestro de una pareja rusa en Alicante tras alegar que le deben 4 millones

El fugitivo puesto en libertad por un juzgado gaditano tras entregarse en Navidad declara que no ordenó el rapto y la juez del caso en Alicante lo encarcela por riesgo de fuga

La Guardia Civil trasladando a prisión a Carlos Garrido el lunes por la noche.

La Guardia Civil trasladando a prisión a Carlos Garrido el lunes por la noche. / Rafa Arjones

Casi ocho meses después del secuestro de una pareja rusa en la playa de San Juan, que luego fue liberada en El Campello, el considerado por la Guardia Civil como presunto cerebro del rapto compareció el pasado lunes ante la magistrada de Alicante que investiga el caso y tras más de dos horas de declaración, en las que negó que ordenara el rapto y alegó que la víctima debe cuatro millones de euros en criptomonedas a unos inversores, acordó su ingreso en prisión sin fianza. El técnico ruso ha negado desde el principio que deba dinero al ahora encarcelado como cerebro de su secuestro.

Carlos Garrido, cuya imagen fue difundida el pasado noviembre por la Guardia Civil para solicitar la colaboración ciudadana para localizar a uno de los fugitivos más buscados, se entregó el pasado 23 de diciembre a la Policía de La Línea de la Concepción y ese mismo día un juzgado de dicha localidad le dejó en libertad pese a la existencia de una orden europea de detención y un acuerdo de prisión de la magistrada del juzgado de Instrucción número 3 de Alicante.

El juez adscrito al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 5 de La Línea de la Concepción justificó entonces su puesta en libertad provisional al disponer solo de un anexo de orden de detención internacional «sin firma oficial» del juzgado de Instrucción número 3 de Alicante y no aparecer grabada documentación sobre esta causa en las bases de datos del Sistema de registros administrativos de apoyo a la Administración de Justicia (SIRAJ).

En el auto de prisión de Garrido la juez precisa que, pese a haber pedido el órgano judicial de Alicante que se le tomase declaración como investigado y se celebrara la comparecencia de prisión, el juzgado de La Línea acordó su puesta en libertad sin tomarle declaración.

Riesgo de fuga

Ahora, tras dos intentos para que el supuesto cabecilla del secuestro compareciera en el juzgado de Instrucción número 3 de Alicante, la juez del caso ha considerado que dadas las penas de cárcel de los delitos que se investigan, el riesgo de fuga y la posibilidad de actuar de nuevo «contra bienes jurídicos de las víctimas» resulta procedente acordar la prisión provisional de Garrido.

Carlos Garrido, a la izquierda, al llegar con su abogado al Palacio de Justicia de Alicante.

Carlos Garrido, a la izquierda, al llegar con su abogado al Palacio de Justicia de Alicante. / PILAR CORTES

Carlos Garrido compareció voluntariamente para declarar por vez primera sobre el secuestro, unos hechos por los que otras seis personas se encuentran en prisión preventiva, entre ellas dos exguardias civiles. Llegó con gesto serio al Palacio de Justicia de Alicante poco después de las seis de la tarde del pasado lunes y tras entrar junto con su abogado salió esposado y custodiado por la Guardia Civil pasadas las diez de la noche.

En su extensa comparecencia en presencia de la magistrada del juzgado de Instrucción número 3 de Alicante, el fiscal y los abogados de la acusación y de las defensas, Carlos Garrido ofreció un relato en el que dejó claro que en ningún momento ordenó el secuestro del técnico ruso experto en gestión de criptomonedas y explicó que contrató a unas personas para localizar a esta persona y presionarla para recuperar cuatro millones de euros que debe a unos inversores cuyo dinero fue gestionado en una plataforma gestionada por la víctima del rapto.

A todos los implicados, excepto a una ciudadana rusa contratada por 2.000 euros para realizar labores de intérprete y a un conocido suyo que le acompañó hasta Alicante, les prometió un determinado porcentaje de beneficio si recuperaban el dinero que les debía y que llevaba cuatro meses reclamándolo sin éxito.

Así, a uno de los exguardias civiles que ahora trabaja como detective privado le contrató para localizar al técnico ruso en Alicante y le prometió un 3% del dinero que se recuperara. Mayor era el porcentaje acordado con los dos presuntos autores materiales de la detención ilegal, los cuales iban a recibir un 20% de los cuatro millones y se hicieron pasar por policías cuando raptaron a la pareja en el PAU 5 de la plata de San Juan el 19 de junio de 2022.

Administrador de los fondos

Según el presunto cabecilla, el secuestrado junto a su mujer era quien administraba los fondos en una plataforma de inversión en criptomonedas y era el único que tenía acceso a dicho dinero.

Carlos Garrido, cuya labor en la empresa era la de comercial, insistió en su comparecencia en que su objetivo era presionar al técnico ruso para que pagase el dinero y por ello contrató a dos personas que se dedican al "cobro de deudas dentro de la ley", dejando entrever que los autores del rapto se excedieron en las formas de presionar al ciudadano ruso y a su mujer.