Cada vez hay más dueños de perros y gatos que optan por alimentar a sus animales con dietas naturales, basadas en carne, huesos carnosos, órganos, vegetales, etc. Esto es lo que se conoce como dieta BARF, o en castellano ACBA (Alimentación Cruda Biológicamente Apropiada).

Si queremos que nuestros perros y gatos alcancen todo su potencial genético en cuanto a su salud, longevidad, actividad física y reproducción, su dieta se debe parecer lo máximo posible a su dieta evolutiva, que es para lo que su cuerpo está diseñado.

El pienso para perros y gatos puede ser lo más cómodo, ya que no requiere mayor esfuerzo que rellenar el comedero de nuestros animales. Pero nunca será lo más adecuado a su biología. Un alimento sin humedad y tan procesado, nunca debería de ser la base de la alimentación de nuestros perros y gatos.

¿Qué comen con la dieta BARF?

Los huesos carnosos son el elemento principal de la dieta natural cruda y cubren la mayor parte de las necesidades de tu perro o gato, siendo la fuente principal de energía, agua, proteínas, grasas, minerales, vitaminas, enzimas y antioxidantes.

Cualquier carne con un origen fiable aunque no sea ecológica, producirá unos resultados nutricionales que están a años luz de los que proporcionan los piensos y alimentos comerciales para mascotas. La proteína procedente de los huesos carnosos es muy superior en cuanto a valor biológico se refiere, que la de los alimentos procesados. Esta proteína no está dañada por el calor de la cocción y conserva todos sus aminoácidos.

Los huesos son muy ricos en grasa, lo que es esencial en la dieta de tu animal. Cualquier parte del animal donde el hueso sea medianamente blando y los huesos crudos, nunca se deben cocinar porque la perdida de humedad hace que estos se astillen con facilidad y formen filos muy peligrosos.

Puedes darle alas de pollo o pavo, cuellos, carcasas de aves o de conejo, falda de ternera, costillas de ternera. No se debe dar un sólo tipo de huesos carnosos, la variedad es importante en la nutrición de tu perro o gato.

Los huesos triturados y huesos recreativos, se trata de grandes duros de ganado o de cerdo, estos les benefician psicológicamente, ya que les entretiene muchísimo y generan endorfinas.

En la dieta BARF de nuestros perros las verduras y frutas deben de sumar como un 15% o 20%, y en la de nuestros gatos sólo un 5%. Las frutas y verduras tienen que estar siempre crudas y trituradas. Como la de todos los carnívoros la dentadura de nuestros perros y gatos no está preparada para masticar vegetales, sino para triturar huesos y desgarrar carne.

Los órganos y las vísceras deben de sumar el 15% de la dieta BARF de tu perro, y de 15% a 25% en la de tu gato. Por supuesto que al igual que los huesos carnosos, los órganos deben estar frescos, darse crudos y tener una procedencia de confianza. Los órganos son la carne que contiene mayor densidad de nutrientes, entre ellos proteínas, ácidos grasos, minerales, vitaminas y encimas.

La cuantía de alimento varía mucho y depende de factores como el tamaño, la raza, la especie, la actividad, la edad, si el animal está en su peso o no. El total de alimentos naturales que tu perro o gato necesita diariamente puede oscilar entre un 1,5% y un 10%, que es un rango muy amplio y para ajustar las tomas de nuestro amigo habrá que considerar los factores anteriormente mencionados en cada caso.

Por lo general se debe de dar más alimento a los animales más jóvenes, a las razas pequeñas o mini, a los que están por debajo de su peso, a los que tienen mucha actividad y a los cachorros. Así un perro pequeño de 2 kilos, joven y de alta actividad podría llegar a requerir hasta un 8% diario de su peso corporal de dieta BARF (160gr), mientras que un perro adulto de 45 kilos y de actividad baja sólo necesitaría un 1,5% diario de su peso corporal (675mg).

Los porcentajes e ingredientes de la dieta BARF los marca la dieta evolutiva, o lo que estos comerían en estado salvaje, por lo que los menús se deben parecer lo máximo posible.

Los porcentajes de la dieta BARF clásica vienen a ser: 60% huesos carnosos, 15% vegetales y verduras (triturados), 10%-15% vísceras y órganos y 5% fruta. El resto se le puede añadir en algunos complementos como la alfalfa, el Kelp, aceite de pescado, yogurt natural o tripa verde.

Beneficios dieta BARF

Entre los beneficios de la dieta natural observarás: incremento de energía y vitalidad, incremento de la masa muscular, desaparición de problemas dentales y limpieza bucal, desaparición de problemas de piel e infecciones de oídos, mejora y en ocasiones desaparición de artritis y problemas articulares, mayor hidratación, resistencia a parásitos internos y externos, no hay peligro de diabetes ni problemas reproductivos, entre otros.

Incluso hay muchos testimonios de propietarios y adiestradores que afirman que mejora el comportamiento de los perros.

  • Mejora los niveles de energía, notarás un cambio en el estado de salud de las mascotas una vez que comienzan a comer alimentación cruda.
  • Dentadura más higiénica, con menos propensión al acumulo de sarro y gingivitis.
  • Reducción de las alergias, es posible con a una dieta adecuada y personalizada.
  • Fácil digestión, se reduce el tiempo de digestión respecto a la dieta seca Protección de las articulaciones. La dieta a base de carne y hueso crudos aporta condroprotectores naturales que prevendrán problemas articulares en edades avanzadas de tu mascota.
  • Reducción de heces. La dieta cruda se aprovecha más que la seca ya que carece de granos de difícil digestión.

Lo que notas en tu perro con la dieta natural

1- Brillo en los ojos y felicidad. Una dieta natural balanceada se reflejará a nivel general en el estado de ánimo de tu perro, lo que hará que esté feliz de la vida!

2- Pelo sano, reducción del olor corporal.

3- Incremento de la energía y de la vitalidad. La dieta natural BARF hará que tu perro obtenga un montón de energía proveniente de la carne y las grasas animales. Además, sus articulaciones estarán perfectamente en forma, reduciendo mucho las posibilidades de desarrollar artritis o problemas de huesos por pérdida mineral.

4- Ciclo digestivo saludable. Con los alimentos naturales notarás una reducción notable en el volumen y el olor de las heces, signo de un ciclo digestivo saludable y unas enzimas digestivas en forma, que ayudan a la absorción de una gran cantidad de nutrientes.

5- Sistema inmune óptimo. Con la dieta BARF el sistema inmune se normaliza y se refuerza. El perro tiene cubiertas todas sus necesidades en cuanto a vitaminas, minerales y ácidos grasos se refiere. Por lo que las enfermedades inflamatorias se reducen, y la respuesta frente a infecciones es veloz y eficaz.

6- Hidratación a través de la comida. El perro o el gato está mucho más hidratado a través de la ingesta de alimento húmedo natural y las tomas de agua se reducen, al igual que el estrés de los riñones y del hígado que no tienen que enfrentarse a un alimento seco desnaturalizado.

7- Peso ideal y huesos fuertes. Al no ingerir hidratos de carbono refinados propios de la alimentación seca o piensos, el índice de obesidad es casi inexistente, al igual que la diabetes o el colon irritable. Tu perro ganará masa muscular y perderá grasa corporal. Esto no hará sólo que el animal se vea mejor, sino que aumente su metabolismo.

8- Dientes y encías sanos. Para mantener unos dientes limpios y mejorar la salud dental de tu perro o gato, nada es mejor que un hueso carnoso crudo. La alimentación natural ayuda a tener menos placa bacteriana, y reduce el mal aliento.