La provincia de Alicante esconde auténticos tesoros a lo largo y ancho de toda su geografía. Con una densidad de población de las más altas del país, la oferta de vivienda en Alicante es considerable. Por eso, todo aquel que viva o esté pensando en comprarse una casa en Alicante sabrá que las posibilidades son infinitas y de lo más variadas.

En las siguientes líneas, nos vamos a detener en lo que ofrece vivir en la costa o en el interior de la provincia de Alicante.

Costa de Alicante

Costa de Alicante

La costa de Alicante es internacionalmente conocida. Localidades como Benidorm, Denia, Jávea, Calpe o Altea atraen a millones de turistas a la costa alicantina. Muchos de estos turistas pasan a ser residentes habituales en estas zonas, tras tomar la decisión de invertir sus ahorros comprando una casa en las mismas. A todos ellos, se suma la población local, que orgullosa de su tierra y de sus raíces, posee su vivienda a orillas del Mediterráneo.

El clima, la cercanía con el mar, la gastronomía, los servicios, etc...todos son factores que invitan a vivir en la costa alicantina. Esto hace que localidades como las citadas más arriba acaparen innumerables ofertas de inmuebles en venta, con características y precios de todos los rangos. La costa de Alicante ofrece, desde económicos apartamentos en Calpe a pie de playa, urbanizaciones con piscina en Benidorm, hasta increíbles chalets en Jávea con vistas al mar . Viviendas que van desde los 60.000 euros de precio, hasta cifras que superan fácilmente los 500.000 euros.

Interior de Alicante

Interior de Alicante

Las montañas de Alicante se imponen a pocos kilómetros del mar. Adentrándonos en la provincia hacia su interior, encontramos sierras, valles fluviales y llanuras. Entre estas riquezas naturales se erigen poblaciones como Villena, Elda o Alcoy, entre otras muchas. Municipios con una alta densidad de población en los que, todo aquel que esté interesado en vivir en los mismos, encontrará, por ejemplo, amplios pisos a precios de lo más asequibles, adosados en Alcoy e, incluso, casas en Elda rodeadas de naturaleza.

La paz del interior de Alicante, desde donde se pueden realizar todo tipo de rutas de senderismo o ciclismo huyendo del ruido, se compatibiliza con la actividad comercial e industrial fuente de riqueza para la región. Vivir en el interior de Alicante es una oportunidad para adentrarse en la naturaleza, teniendo al alcance de la mano todo tipo de infraestructuras, servicios y tejido empresarial.Todo ello con viviendas que te sorprenderán por sus amplias superficies, materiales y, sobretodo, interesantísimos precios.