Aprender el Derecho Civil a través del trabajo colaborativo

Para los profesores del CEU UCH Lola Cano y el notario Gaspar Peral Bernat conocer y aprender el Derecho Civil se puede conseguir transformando las propias aulas universitarias en una red de trabajo colaborativo. Esto es, adquiriendo competencias demandadas por el mercado laboral, al tiempo que se favorece la creatividad y capacidad crítica de los futuros juristas. Y ellos lo hacen a través de un proyecto de innovación educativa que han presentado en el International Congress of Educational and Teaching Innovation 2023 (III-CEU-CIIED).

Y es que, tradicionalmente, en los estudios del Grado en Derecho «los profesores hemos aplicado la metodología de la clase magistral. Complementada, eso sí, con la realización de prácticas para una mejor comprensión de la teoría, bien desarrolladas de forma individual, o bien en grupo», apunta Cano. De ahí la necesidad de un cambio que facilite la consecución de los resultados de aprendizaje de las diferentes asignaturas implicadas. Se trata, por tanto, de la necesidad de enseñar por medio de metodologías activas. «La finalidad es permitir que los alumnos sean los protagonistas del proceso de aprendizaje. Ello implica que los docentes dejen de ser meros transmisores del conocimiento, para convertirse en diseñadores de experiencias intelectuales para sus estudiantes».

Para lograrlo, los docentes han transformado el aula en una red de trabajo colaborativo. Teniendo en cuenta que los estudios del Grado en Derecho se configuran como una carrera formativa de corte clásico. En ella, la capacidad de razonamiento, comprensión y análisis son esenciales para culminarlos con éxito. Y, en particular, con el estudio del Derecho Civil, por su papel relevante en el Ordenamiento Jurídico, por su complejidad y extensión. «Se trata de una materia densa, en ocasiones abstrusa, que requiere un esfuerzo en su estudio por parte del alumno. Pero también insta al profesor a desarrollar su labor con especial ahínco, con el objetivo de conseguir el óptimo aprendizaje de sus estudiantes».

Transformar el aula en una red de trabajo colaborativo

Para llevar a cabo el desarrollo de este proyecto de trabajo colaborativo en el aula se han diseñado diferentes actividades que se realizan durante todo el curso académico. Así, de inicio se han constituido equipos de trabajo estables al inicio del cuatrimestre, integrados por 3 o 4 estudiantes. Para crear un sentimiento de pertenencia dentro del equipo se ha asignado a cada integrante un rol para evitar las actitudes pasivas o dominantes. «Con ello se potencia la cohesión del equipo y la inclusión, todos se deben sentir incluidos, aceptados y valorados».

Los roles con los que se desempeñan son diversos, además de ser rotatorios. Así, se encuentra el de LÍDERES. Partiendo del temario proporcionado con antelación por el profesor, y que estará disponible para todos los alumnos en la plataforma Blackboard el primer día de clase, estará encargado de explicar el tema a sus compañeros, con apoyo en una presentación PowerPoint, y realizar al comienzo y finalización de la clase un breve resumen exponiendo las principales conclusiones.

Otro de los roles es el de expertos en jurisprudencia y son varios los equipos que ejerzan simultáneamente este rol. «Deberán buscar y analizar —siguiendo el modelo de ficha de análisis jurisprudencial proporcionado por el profesor desde primer curso en la asignatura Introducción al Derecho Civil— dos sentencias del Tribunal Supremo sobre la temática indicada por el profesor en el cronograma. Los equipos expertos en jurisprudencia elaboran una ficha de jurisprudencia de cada una de ellas. Así, cuando el equipo LÍDER vaya a explicar la materia que en ellas se trata, les dará entrada y la expondrán relacionando los conceptos y la legislación con la doctrina jurisprudencial».

Por último, existe el rol de operadores jurídicos, que será asumido simultáneamente por todos los equipos. Consiste en la resolución de casos prácticos totalmente coordinados con la enseñanza teórica. «Cada uno de los equipos adoptará perspectivas distintas (demandante / demandado). Los equipos analizarán los hechos, debatiendo las posibles soluciones, argumentando jurídicamente por escrito sus propuestas. Finalmente se hará una puesta en común oral, pudiendo realizar un Role Play jurídico entre los distintos equipos. El profesor cerrará la actividad corrigiendo los errores observados y exponiendo a modo de conclusión las soluciones propuestas más aconsejables jurídicamente».

La mejora del aprendizaje de los futuros juristas

Aprender el Derecho Civil a través del trabajo colaborativo

Para Lola Cano y Gaspar Peral los objetivos son claros. En primer lugar, aprender a trabajar en equipo, desarrollando un sentimiento de pertenencia. También, mejorar la capacidad de comunicación y liderazgo, al tiempo que se fomenta la oratoria, con lo que se adquiere confianza en las exposiciones. Ello permite asimilar mejor los conceptos estudiados, «ya que para poderlos explicar primero deben ser entendidos».

En paralelo, se analiza la jurisprudencia y se adquieren estrategias de negociación y adaptación, «siendo capaz de solucionar problemas al ser más tolerante y flexible». En definitiva, el trabajo colaborativo permite alcanzar un óptimo aprendizaje de los alumnos y que adquieran competencias demandadas por el mercado laboral. Además, se favorece su creatividad y capacidad crítica.