El concejal de Urbanismo, Antonio Zapata (PSOE), tiene previsto enviar la semana próxima a un técnico a la planta de Proambiente para conocer los motivos de la acumulación de un desecho inflamable en los exteriores de una de las naves. Este producto es utilizado como combustible pero la crisis económica también ha provocado que en estos momentos no tenga venta y que se esté amontonando.

Su nombre es «blending» y al diario también han llegado algunas quejas en referencia a esta acumulación, al tiempo que se advierte que si se produce un descuido y salta una simple chispa se podría generar un incendio. El Ayuntamiento tratará de evitar cualquier peligro, dijo Zapata.