El macrovertedero contiene montañas de basura que se han acumulado durante años en una parcela que está sin vallar y que carece de control en sus accesos, según denunció ayer el partido Claro. Tanto los vecinos como la formación exigen la retirada de estos residuos, porque además de causar malos olores, también generan gases tóxicos que pueden ser peligrosos para los residentes de la zona. Por todo ello, piden la restauración integral de los terrenos afectados.