El Auditorio Internacional de Torrevieja acogió anoche un nuevo concierto de la Orquesta Sinfónica de Torrevieja, que bajo el formato de gala lírica contaba en esta ocasión y de manera excepcional con la participación de la conocida soprano Eteri Lamoris. La calidad del instrumento vocal de esta cantante quedó patente en el repertorio elegido para un recital que combinó protagonismo lírico con la interpretación orquestal. Un repertorio confeccionado con piezas populares de grandes de la ópera como Verdi o Puccini, junto a otras de compositores españoles como Granados, Serrano o Chapí que fueron muy celebradas por el público.

De nuevo también, y es norma desde que la OST inició sus ciclos de concierto en el espectacular auditorio torrevejense, el aforo para más de 1.400 espectadores volvió a llenarse pese a los inconvenientes de acceso que presenta el recinto, e incluso, en ocasiones como la de ayer, de aparcamiento. Un público ávido de espectáculos musicales de calidad que suele responder con su presencia a las convocatorias de una Orquesta Sinfónica a la que le sienta bien su rodaje en el Auditorio Internacional, y reconoce con sus aplausos el esfuerzo coral de sus interpretaciones.

La actuación de Eteri Lamoris, cuyas interpretaciones de la Violetta de La Traviata han sido aplaudidas por la crítica internacional, brilló por la limpidez del instrumento vocal que maneja con maestría y por su profesionalidad adaptándose a cualquier terreno musical.

Propinas

El público, entre los que destaca la presencia mayoritaria de residentes internacioneles, disfrutó de más de dos horas de un amplio repertorio en el que se interpretaron 17 piezas y dos "propinas" bajo la batuta de José Francisco Sánchez, que en el último bis acompañó con el oboe la voz limpia de Lamoris, poniendo el broche final a su actuación con una adaptación de La Misión de Morricone.