La junta de gobierno local del Ayuntamiento de Torrevieja aprobó ayer el expediente, la convocatoria de licitación, los pliegos administrativos y técnicos y la adopción del compromiso de gasto para la contratación del servicio de limpieza de viviendas insalubres, los llamados «síndromes de Diógenes». El contrato tendría una duración de tres años, con opción a prórroga por otro más, y un coste anual de 24.200 euros. Las personas afectadas por «Diógenes» les lleva a acumular en su domicilio grandes cantidades de basura y de desperdicios. El municipio ya adjudicó por un año este contrato en este mandato.

Torrevieja se enfrenta todos los años a un mínimo de ocho de estos casos, que no son fáciles de resolver, no solo por la inversión necesaria -una media de 3.000 euros por vivienda-, también porque normalmente se actúa tras lograr una resolución judicial de entrada en las viviendas afectadas, normalmente denunciadas por la propia comunidad, en una resolución que no siempre es automática. El contrato también se plantea para los casos de limpiezas traumáticas de personas que fallecen solas sin que nadie se percate durante días -a veces coinciden con las situaciones de acumulación de basuras-.

Para este servicio hay que contratar a empresas especializadas que trabajan en equipo, con mascarillas y vestuario especial, para retirar cientos de kilos de basuras, y en el peor de los casos, los restos biológicos de personas fallecidas. Además, entre otras intervenciones, hay que fumigar y tratar las estancias con ozono para acabar con el hedor acumulado.

Terminar la ampliación

Los miembros que forman la Junta de Gobierno Local, en otro de los puntos del orden del día aprobaron ayer en su sesión ordinaria «resolver» el contrato de obras de construcción del edificio para la ampliación del Ayuntamiento, anejo al mismo, proceder a la liquidación y contratar el final de obra, según informó ayer José Hurtado, quien ayer dio cuenta de los acuerdos tomados en este órgano colegiado como secretario suplente.

El edil explicó que por fin se ve el final de este asunto «para el que ha habido que esperar tres meses un informe del Consell Jurídic Consultiu, que era preceptivo y que ha venido a dar la razón al Ayuntamiento», que ante la situación por la que atraviesa la empresa, que ha abandonado la obra sin terminar, les comunicó su intención de resolver el contrato a lo que esta se negó, cuestión que dio lugar a la solicitud del citado informe.

Ahora el Ayuntamiento puede adjudicar un contrato menor con el objetivo de terminar una obra que se paralizó hace más de un año. Pese a que lo que resta de la ampliación es muy poco -la ubicación de una puerta de acceso- y el enlucido de una jardinera situada justo en el principal acceso al edificio consistorial, la imagen que ha dado la administración local durante estos meses ha generado muchas críticas por parte de la oposición, que hablaba de resolver el problema, al margen de la situación jurídica del contrato.

El gobierno no ha querido intervenir hasta que no estuviera resuelto el contrato para evitar reclamaciones. La ampliación debe servir para alojar servicios municipales que ahora están en locales alquilados, y que para los que se han tenido que prolongar arrendamientos.