La retirada de la Cruz de los Caídos de Callosa de Segura y todo lo que sucedió antes y está ocurriendo después parece escrito por uno de los mejores guionistas cinematográficos y también podría convertirse, perfectamente, en una serie televisiva. El último de los capítulos se ha producido este fin de semana con la reaparición del monolito en la plaza de España, un mes después de que fuera retirado de este lugar. Pero no lo ha hecho de forma física, sino que la Cruz «ha vuelto» convertida en un holograma luminoso que ocupa el mismo lugar en el que los operarios, por mandato del Ayuntamiento en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica, la quitaron entre protestas de los partidarios de que se quedara allí. La imagen cuenta con un tamaño similar a la Cruz original -algo más grande-, con los dos faroles de los lados y el pedestal aunque, eso sí, sin los nombres de los 81 caídos.

La Plataforma en Defensa de la Cruz llevaba días anunciando en sus redes sociales que «algo va a suceder» y «todos veremos la resurrección» junto a varios pasajes de la Biblia y haciendo un símil con la resurrección de Jesucristo. La fecha estaba marcada para el sábado 10 de marzo a las 20.30 horas, lo que había creado cierta expectación, también entre la Policía Local que también estuvo presente en esa misteriosa «resurrección» para prevenir posibles altercados y evitar posibles concentraciones ilegales, después de todo lo sucedido en torno a la Cruz, con incidentes durante el desalojo de la plaza de las personas que llevaban meses custodiándola para que no se quitara.

La «resurrección» llegó a la hora prevista y se desveló el misterio. Desde un balcón diversos miembros se esa plataforma leyeron pasajes de la Biblia, haciendo mención a la resurrección de Cristo y con ello a la de la Cruz. Instantes después un foco iluminó la pared de la iglesia y apareció la imagen de la Cruz de los Caídos, una escultura de luz que fue ovacionada por las 150 personas que se congregaron en la plaza. Los agentes identificaron a los responsables de la concentración, que carecía de permiso de la Subdelegación del Gobierno, y a la vecina desde cuyo balcón se proyectó el holograma, al hacerlo sobre un espacio público.

La vigilia volvió a repetirse anoche y la intención de sus propulsores es mantener el holograma iluminado durante los días que restan de la Cuaresma, aunque desde la plataforma vecinal temen que «el alcalde pondrá todos los impedimentos posibles, incluso por la vía de las sanciones y/o multas, pero este clamor es ya imposible de acallar, están dispuestos a hacer frente a todo por la Cruz», señalaron en un comunicado. En la página de Facebook de la plataforma ayer se podía leer «Cristo ha resucitado» junto a una imagen del holograma proyectado sobre la pared de la iglesia.

Sanciones

El alcalde de Callosa, Fran Maciá, señaló a este diario que hoy el Ayuntamiento redactará un informe con los partes policiales para remitirlo a la Subdelegación del Gobierno «por una concentración no comunicada y por la proyección sobre la vía pública sin autorización, por si considera que debe imponer sanciones administrativas, ya que la plataforma sabe perfectamente cuáles son los cauces para solicitar una concentración de manera legal».