El informe encargado por la Conselleria de Sanidad tras las informaciones que apuntaban a que el ahora alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, estuvo durante más de 4 años (entre el 1 de noviembre de 2007 y 2011), en su labor profesional como médico, en una adscripción funcional en la Dirección Territorial de Sanidad en Alicante sin acudir a su puesto de trabajo, aunque sí cobrando su nómina, no puede ser más demoledor.

Las conclusiones las ha desvelado esta tarde en Las Cortes Valencianas la propia consellera del área, Ana Barceló, tras una pregunta de la diputada de Compromís, Mireia Mollà, que quería conocer en qué punto se encontraba dicho informe "porque de ser cierto lo publicado, Bascuñana deberá abandonar la Alcaldía de Orihuela".

Dicho informe está terminado y en el mismo, como ha explicado Barceló, se señala que no hay ninguna constancia de que "el doctor Emilio Bascuñana" (como se ha dirigido a el alcalde de Orihuela la consellera) haya realizado ninguna labor en ese puesto asignado durante ese tiempo, por lo que estuvo cobrando 55.000 euros al año.

Es más, según la consellera del PSOE "no se ha encontrado ningún documento descriptivo de las funciones, supuestamente, encomendadas, ni el objetivo, ni el contenido ni la misión de ese trabajo". Por ello, Barceló ha anunciado que su Conselleria va a abrir un expediente informativo "para valorar si cabe algún tipo de acción ya sea administrativo o avanzar más", ha dicho, en referencia a solicitar un informe a la Abogacía de la Generalitat "por si hubiera lugar a otro tipo de responsabilidades", ha adelantado la consellera. Ahora, en ese expediente informativo, tendrá oportunidad el actual alcalde de Orihuela de dar sus explicaciones y remitir las pruebas que tenga en su poder del trabajo realizado durante ese tiempo.

El informe llega aún más lejos porque señala que se ha contactado con los funcionarios de esa Dirección Territorial de Sanidad que, en teoría, deberían haber coincidido con Emilio Bascuñana, pero a ninguno le consta que éste hiciera acto de presencia física en sus dependencias ni tampoco tienen constancia de su paso por ellas. "Ni siquiera que tuviera despacho", ha añadido la Consellera de Sanidad.

Por tanto, ha procedido Barceló, "no se puede constatar que el citado funcionario hiciera tareas o realizara actividades durante ese periodo y, de haberlo hecho, no quedaron registradas y no constan en la Dirección Territorial". Ni siquiera consta en el registro de entrada de la Dirección Territorial de Sanidad la resolución de esa adscripción funcional en ese departamento, solo en el expediente, ha señalado la consellera.

Para elaborar el informe que se inició el 1 de junio, desde la Conselleria se han puesto en contacto con la Dirección Médica de Atención Primaria del Departamento de Salud de Orihuela, donde estaba adscrito Bascuñana, desde donde se ha remitido que entre 2007 y 2011 no hay registrada ninguna actividad por parte del ahora regidor, aunque sí señala que vuelve a aparecer en el programa que realiza el seguimiento y la actividad del personal sanitario, el 24 de enero de 2012, cuando pidió un permiso de vacaciones, además de dos bajas que tuvo, constatando que en ese periodo de tiempo sí tuvo actividad, al contrario de lo que se señalaba en las primeras informaciones.

Tanto en ese programa como en el expediente personal de Bascuñana como médico, aparece que entre 2007 y 2014 realizó su trabajo en distintos centros de salud vinculados al departamento de Orihuela. El 1 de noviembre de 2007 fue adscrito a la Dirección Territorial de Alicante, para realizar tareas de asesoramiento relacionadas con drogas y conductas adictivas, según explicó el propio Emilio Bascuñana tras destaparse el escándalo. Y en abril de 2013 pasó a coordinar el Centro de Salud de Almoradí.

Reacciones

En su pregunta, Mireia Mollà ha comparado el que Bascuñana estuviera, supuestamente, cobrando durante sin ir a trabajar "con el falso máster de Cifuentes o el de Pablo Casado". Las reacciones a las conclusiones del informe desvelado por la Consellera de Sanidad, no se han hecho esperar.

El primero en pedir la dimisión del alcalde de Orihuela por estos hechos, anteriores a su etapa política, ha sido el diputado autonómico del PSOE y coordinador comarcal de este partido, Manuel Pineda, quien en una nota enviada solo instantes después de que terminara de hablar en la sede de Las Cortes Ana Barceló, señala que la situación de Emilio Bascuñana al frente de la Alcaldía de Orihuela "es insostenible", y exige explicaciones al PPCV y, en concreto, a su secretaria general, Eva Ortiz, de quien dice la "gran impulsora del actual alcalde de Orihuela".

Más esperada es la reacción del socio de gobierno del PP en Orihuela, Ciudadanos, ya que su portavoz, Juan Ignacio López-Bas, señaló tras destaparse este escándalo que si la Conselleria confirma las informaciones publicadas «pediremos a Emilio Bascuñana que dé un paso atrás y Ciudadanos se planteará salir del gobierno o pedir su dimisión».

El pasado 22 de junio, se celebró una sesión extraordinaria, pedida por la oposición, para pedir explicaciones al alcalde oriolano por, presuntamente, cobrar más de 330.000 euros entre 2007 y 2014 sin acudir a su puesto de trabajo en la Dirección Territorial de Sanidad en Alicante. Aunque fue una sesión monográfica porque el regidor se negó a contestar tanto a PSOE como a Cambiemos. Les dijo, eso sí, que los interrogatorios se hacen en los tribunales