Orihuela Costa solo cuenta con una patrulla de Policía Local por las noches, a pesar de estar en pleno mes de julio, cuando la población en las urbanizaciones del litoral se multiplica por cinco, y con ello, también el número de servicios que deben atender los 3 agentes destinados en horario nocturno -dos son los que patrullan, mientras otro está en el retén de Playa Flamenca-. La noche del jueves al viernes fue especialmente movida en la costa oriolana en cuanto a incidentes y accidentes, por lo que los escasos efectivos policiales se vieron desbordados, poniendo en evidencia la clara falta de policías en la zona. Los dos incidentes más graves ocurrieron de madrugada y casi simultáneamente.

El primer aviso que atendieron fue el de una carrera ilegal con varios vehículos de alta gama implicados. Uno de ellos, un BMW de color blanco, se empotró contra el muro exterior de una vivienda y acabó medio coche dentro de la parcela y el conductor huido, aunque se presentó ayer por la mañana en la Jefatura de la Policía Local junto a su abogado. Cuando estaban allí los agentes recibieron el aviso de que un conductor visiblemente ebrio había acabado con su vehículo dentro de una mediana, destrozando varios arbustos. A pesar de la insistencia de los vecinos porque veían que el hombre trataba de sacar el coche para huir del lugar, los agentes no podían dejar el anterior servicio y tuvieron que atender este último unos cuantos minutos después y acabaron deteniendo al conductor. En estos casos el agente que se queda en el retén tuvo que coger uno de los vehículos para reforzar a sus dos compañeros. Los tres agentes pudieron atender finalmente todos los servicios con un trabajo más que encomiable por las condiciones en el que lo tienen que desarrollar.

No fueron los únicos altercados en una noche que fuentes policiales calificaron «de locos». La falta de policías por las noches en Orihuela Costa ha sido denunciada en varias ocasiones por los sindicatos, sin que se le haya puesto una solución. Los vecinos del litoral reclaman una mayor atención en labores de vigilancia y prevención de delitos que se multiplican durante el verano con la llegada masiva de turistas. A muchos servicios los agentes llegan tarde porque están atendiendo otros, lo que indigna a los llamantes quienes suelen recriminarles la tardanza. No pueden hacer más. Están bajo mínimos y hay noches que ni siquiera pueden tomar un pequeño descanso porque tienen que atender un servicio tras otro, una llamada tras otra.

La indignación entre los agentes es evidente. Más, si se compara el número de efectivos en los dos términos municipales que limitan con la costa de Orihuela. Mientras que en Torrevieja hay entre 5 y 6 patrullas en horario nocturno durante el verano y en Pilar de la Horadada hay 4, en la costa de Orihuela, con una población estival que ronda las 200.000 personas, solamente hay una. Anoche solo dos policías cubrieron la costa oriolana.

Falta de medios

Además, los agentes denuncian la falta de medios materiales. Hace meses se adquirieron walkies para sustituir a los que usaban el viejo sistema, pero no se ha instalado una antena receptora de satélite en la Costa para permitir su funcionamiento, por lo que los agentes se quedan continuamente sin cobertura, sobre todo en las urbanizaciones del interior, impidiendo la comunicación entre ellos y con la central, por lo que se ven obligados a hacer uso de sus móviles.

Y lo que más preocupa a los agentes que hacen turno de noche en la Costa: no se les permite el uso de pistolas táser (eléctricas), al contrario que a sus compañeros de las patrullas diurnas. Esto provoca una mayor inseguridad a los policías que aseguran que podían evitar agresiones como la que se produjo el pasado martes por la noche cuando un individuo ebrio agredió a dos agentes, que están de baja.