Una marcha reivindicativa, enmarcada dentro de las XII Jornadas en Defensa de los Caminos Públicos, recorrió ayer parte de la Cañada Real de la Costa, en concreto su tramo más emblemático entre el Paraje de Lo Ferrís y Punta Prima, al sur de Torrevieja. Por allí discurre una vía pecuaria que, según denunciaron ayer, corre peligro. Las vallas, tanto metálicas como de hormigón, han ocupado gran parte de ese paisaje por la decisión de los propietarios de los terrenos junto a la Cañada Real de delimitarlos. Aunque la Generalitat Valenciana tiene que pronunciarse sobre si han invadido parte de ese camino público. Un centenar de personas, unos 50 ciclistas y una treintena de ovejas, participaron ayer en la marcha para reivindicar que ese camino es público desde hace mucho, mucho tiempo, y una vía pecuaria donde pasaba el ganado.

Las jornadas que desde el jueves reúnen en Torrevieja a expertos - organizadas por el Ayuntamiento, la sede de la Universidad de Alicante en Torrevieja, la Plataforma Ibérica por los Caminos Públicos (PICP) y la Asociación Salvemos Lo Ferrís-, tratan de reivindicar la protección de las administraciones públicas y la puesta en valor de los caminos públicos y vías pecuarias que sirvieron a lo largo de los siglos como territorio de paso para la ganadería trashumante, la conexión vecinal de los pueblos y una zona de ocio y patrimonio etnográfico. La Plataforma Ibérica por los Caminos Públicos (PICP), que aglutina a 24 asociaciones de toda España, participó ayer en la marcha y puso como ejemplo de mala gestión de las administraciones públicas la Cañada Real de la Costa, especialmente a su paso por Lo Ferrís. Por su parte, Juan Antonio Marco Molina, geógrafo de la Universidad de Alicante, explicó la importancia de una planta que crece en este espacio, la jarilla cabeza de gato, que en zonas como La Veleta ha quedado muy reducida.

Desde Salvemos Lo Ferrís señalaron que las jornadas han dejado al descubierto el choque que existe entre administraciones a la hora de gestionar los espacios públicos, ya que los caminos son competencia de los ayuntamientos mientras que las cañadas reales y vías pecuarias corresponden a la administración autonómica. «Se necesita voluntad política para proteger los caminos públicos», señaló una portavoz de este colectivo. Estas jornadas han servido para abrir una vía de colaboración con la Universidad de Alicante para dotar de contenido científico sus reivindicaciones.

Deslinde

Los participantes en la marcha se quejaron de que no se respeten los límites de la Cañada Real de la Costa. Está pendiente que la Conselleria termine el proceso de clasificación de la vía que es la que marca el trazado y su anchura. Se ha acabado el periodo de alegaciones y se espera la resolución que clasifique la cañada, que es el paso previo al deslinde de esta vía pecuaria. Salvemos Lo Ferrís se opone a que se rebaje menos de 75 metros, que se reduzca y no se adapte al uso y al trazado histórico que tiene la Cañada Real de la Costa. La asociación advirtió de que es un camino público que está protegido por la ley y que pasa por el paraje Lo Ferrís, de gran valor ambiental, paisajístico y cultural. Todo ello motivó que el Ayuntamiento revisara la licencia de obra del muro y pidiera a la Conselleria que deslindara esta vía pecuaria. Como primer paso, se ha comenzado su clasificación para determinar su trazado.

Muchos de los que asistieron, de toda España, se mostraron sorprendidos por el brutal desarrollo urbanístico del litoral de la Vega Baja y que se hayan respetado poco los caminos públicos. Lo Ferrís es el último tramo sin urbanizar de la costa torrevejense, un paraíso que se resiste a perderse. Salvemos Lo Ferrís pide su deslinde y así lo reclama a la Generalitat. Según esta asociación vecinal, los informes de Conselleria señalan que en algunos tramos el muro corta la Cañada Real y esperan que pueda ordenarse a los propietarios de los terrenos que lo echen unos metros hacia atrás.

El alcalde de Torrevieja, José Manuel Dolón, aseguró el pasado viernes, en la inauguración de las jornadas, que «hay presiones y expectativas de poder urbanizar» por parte de los propietarios de la finca Lo Ferrís, y recordó que anteriormente una constructora ya realizó «un proyecto para construir en altura varios bloques que dieran rentabilidad económica a este pequeño espacio», que calificó de «una pequeña ventana al mar sin cemento». Y apuntó que la figura de protección que el PGOU otorga a Ferrís es «endeble» y destacó su situación de abandono. «Si se ve de lejos es muy bonito, pero si te acercas es una pena. Los propietarios jamás lo han cuidado», indicó el alcalde torrevejense.

Pativel

Con la aprobación del Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde del Litoral (Pativel), que entiende que se debe proteger ese espacio como un corredor hacia el parque natural, los defensores de la Cañada Real ven algo despejado un cielo donde antes todo eran nubes. Rosa Pardo Marín, directora general de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Paisaje de la Conselleria de Vivienda, Obras Públicas y Vertebración del Territorio, anunció en las jornadas que habrá un plan de acción territorial de la Vega Baja y explicó que el Pativel recoge las vías pecuarias como bien de interés cultural.

Además, señaló que éste pretende gestionar de forma integral el patrimonio ambiental y cultural y también dibuja una vía litoral que atraviesa toda la comunidad y que pretende cohesionar y facilitar las comunicaciones no motorizadas. «Es un soporte de movilidad que refuerza la idea de cohesión territorial», enfatizó Pardo, quien indicó que «cada municipio tendrá que concretar el trazado de la vía verde del litoral en su plan general de ordenación urbana».

Los participantes en la marcha de ayer terminaron la jornada en el centro de interpretación del Parque Natural de las Lagunas de La Mata y Torrevieja, una zona importante para la Cañada Real, donde tuvieron la misma conclusión: que sean caminos abiertos para el disfrute de todos, puesto que son de todos.