Por segundo año consecutivo la primavera entra en Torrevieja albergando en sus espacios comerciales intervenciones que transformarán el centro de la ciudad con el objetivo de "revalorizar el patrimonio comercial y provocar una reflexión sobre la ciudad y el paisaje". Esta acción invita a considerar los espacios comerciales de las áreas turísticas como parte esencial de la imagen de la ciudad y como parte de un patrimonio cultural, estético y productivo, que debemos cuidar y regenerar, según explicó ayer la profesora Adriana Figueiras en la presentación de Arquitecturas Efímeras en la Sociedad Casino de Torrevieja, que además alberga una del las creaciones más llamativas, protagonizada por la artemia salina. En esa misma presentación en uno de los salones modernistas del Casino estuvieron presentes además la concejala de Comercio y Hostelería, Manuela Osuna (Los Verdes) y el coordinador de la sede universitaria de la Universidad de Alicante (UA) en Torrevieja, Norberto Mazón, además de estudiantes de arquitectura de la UA.

La mayor parte de las instalaciones ya pueden disfrutarse en Torrevieja y son la culminación de cuatro meses de intenso trabajo en la escuela de Arquitectura de la Universidad de Alicante, llevado a cabo por cuarenta y seis estudiantes bajo la dirección de la profesora Adriana Figueiras y la colaboración de la arquitecta Carolina Gómez. El acto oficial de inauguración con autoridades tendrá lugar en el Casino el día jueves 09 de mayo a las 11:00, y la apertura de las instalaciones efímeras con recorrido del jurado se efectuará el viernes 10 a las 17:30.

En una primera fase, los alumnos trabajaron de manera individual identificando oportunidades y proponiendo proyectos en torno a las lagunas y sus instalaciones salineras. "Estas propuestas buscaban el punto apropiado en el que podían introducirse para reforzar o re-equilibrar sistemas existentes a nivel ecológico, social, industrial, turístico o paisajístico", según Figueiras. De ahí surgieron santuarios para aves y criaderos de plancton, centros para la salud y para la moda consciente, espacios para la didáctica, la artesanía y las tradiciones, proyectos para el aprovechamiento energético de toda la superficie de la laguna rosa y así, cuarenta y seis ideas en total.

En la fase final de trabajo, explica Figueiras, los estudiantes se han organizado en quince grupos y han trasladado "sus reflexiones originales a construcciones reales que instalarán en quince comercios de la ciudad que habían presentado su candidatura para participar de esta experiencia académica y colectiva". Las quince instalaciones competirán por tres premios que otorgará la Concejalía de Comercios con intervención de jurado. Además, se podrá disfrutar de una instalación anfitriona, fuera de concurso, en el Casino de Torrevieja.

La iniciativa se realizará bajo la coordinación y patrocinio de la Concejalía de Comercio y la Sede Universitaria, contando además con la donación por parte de las Salinas de Torrevieja de los cinco mil kilos de sal a utilizar en los trabajos y que será el elemento emblemático de conexión con el lugar.

Esta acción transforma temporalmente la ciudad, busca la sorpresa, el asombro y la diversión inteligentes. La comunicación de las instalaciones efímeras con los ciudadanos se consigue a través de las emociones que son capaces de evocar, pero esto no es más que un paso para abrir camino a las reflexiones de ciudad y de identidad que subyacen en todo este enorme esfuerzo colectivo. Esta sinergia es, sin duda, el motor de la creación y de la construcción de futuro que da sentido a una docencia universitaria integrada de manera dinámica en su entorno.

La iniciativa "Arquitecturas Efímeras" cuenta con cinco ediciones anteriores en la ciudad de Alicante, tres de ellas en el ámbito comercial y otras dos en el cultural. Sus principales objetivos han sido promover la participación activa de estudiantes, comerciantes, instituciones, empresas y ciudadanos en la arquitectura y el diseño e involucrar al entorno en un proceso de colaboración y de compromiso público.

A lo largo de las cinco ediciones anteriores, unos ciento cincuenta jóvenes realizaron cincuenta proyectos de pequeña escala y bajo coste que lograron una gran movilización social y mediática. El proyecto "Arquitecturas Efímeras" fue reconocido en 2015 con el Premio Nacional de Arquitectura Efímera, Emporia de Oro y en 2017 con la Selección Emporia.