La empresa que presta el servicio de arrastre con grúa y custodia de vehículos para el Ayuntamiento de Torrevieja, Servicleop, ya no tiene contrato con el municipio. Expiró el pasado 3 de marzo. Los técnicos municipales tuvieron que elaborar a toda prisa un informe que justificara que la misma empresa siguiera realizando la prestación sin que medie contrato y con idénticas condiciones económicas. Un acuerdo que solo puede prolongarse durante seis meses -ya han transcurrido casi tres-. El argumento es que es un servicio esencial del que el Ayuntamiento no puede prescindir.
El concurso para adjudicar a una empresa y regularizar la situación no va a llegar de forma inminente. El pliego de condiciones no está redactado ni aprobado. Por lo que la licitación y adjudicación no estará formalizada, con una estimación optimista, hasta el próximo otoño.
La tramitación de este expediente es otro ejemplo de manual de la falta agilidad de la labor administrativa del Ayuntamiento a la hora de contratar, y en este caso se puede achacar la responsabilidad, en la misma medida, al anterior gobierno de coalición de izquierdas que al actual del PP porque se han repartido, sin éxito, los dos años de margen para sacar adelante el expediente. Ahora el organigrama municipal cuenta con un alto cargo fichado por el alcalde Eduardo Dolón por cien mil euros al año para agilizar esos trámites: la directora general de Contratación.
En septiembre de 2018, poco después de agotarse los diez años de vigencia del contrato -que se adjudicó en febrero de 2008- la junta de gobierno local inició el nuevo expediente de adjudicación. Como en otras tantas situaciones similares en el Ayuntamiento de Torrevieja, los dos años de anticipación y los cambios de dirección política han sido inútiles. En febrero de este año concluyó la segunda y última prórroga posible de un año. Y el nuevo contrato no ha llegado por lo que carece de la misma cobertura legal y garantías que ampara una adjudicación pública, aunque se haya avalado con un informe técnico su prolongación.
El balance de tramitación de estos dos años se limita a ese anuncio previo de septiembre de 2018; la renuncia del comisario de la Policía Local a instruir el expediente en agosto de 2019 -casi un año después sin avanzar en el procedimiento, y la designación del intendente y otro mando para el mismo cometido-; una comunicación de la edil de Contratación, Carmen Gómez (PP) en octubre de 2019 para modificar el objeto del contrato e incluir la señalización y vallado de las calles en eventos municipales, al arrastre y custodia de vehículos en la contrata, y ya en febrero de este año, siete meses después del cambio de instructores, la memoria justificativa del contrato. Un documento de cuatro folios, en la que se incluye otro informe del área económica para justificar que el contrato no se realice por lotes y que existe consignación presupuestaria.
La memoria señala un periodo de adjudicación de cinco años y un desembolso de 709.000 euros anuales (IVA incluido), con el cálculo reducido porque este año y 2025 no serán anualidades completas.
El Ayuntamiento de Torrevieja adjudicó a Servicleop la contrata en febrero de 2008 por casi 400.000 euros anuales. Un servicio muy deficitario. El número de arrastres por sanción, que supone la parte variable de ingresos de la empresa, siempre ha sido mucho más bajo que el estimado por los técnicos hasta el punto que el municipio llegó a empotrar a un policía local en la grúa para intentar remontar esos números-.
La tasa de arrastre de la grúa es uno de los más económicos de la provincia pero el servicio recibe muchas quejas, en especial por la ubicación del depósito en el polígono industrial Casagrande, más de un kilómetro y medio de la zona en la que se realizan la mayor parte de las multas y arrastres, lo que obliga a desplazamientos en vehículo particular o taxi para "rescatar el coche" y problemas de atención al usuario. Además la empresa ha tenido que improvisar otra zona de depósito -las grúas son las primeras en estar mal estacionadas sobre la acera del acceso al depósito por falta de espacio en el interior y en los viales del polígono industrial-.
En su día también fue polémica la custodia que realizaba de vehículos inmovilizados por procedimientos judiciales -uno de esos coches terminó en manos de un tercero algo de lo que se enteró el titular del coche cuando fue a recuperarlo tras recibir el visto bueno del juzgado-. El juzgado no halló delito en la falta de custodia de ese coche, que señalaba a agentes de la Policía, no a la empresa.
20 millones
Torrevieja recibe la prestación de varios servicios esenciales sin contrato desde hace años. El principal es la recogida de basura y aseo urbano -desde junio de 2016- . También el transporte urbano, además del servicio de contención de plagas -muy importante en una ciudad con focos permanentes de mosquitos en torno a la orilla la laguna de Torrevieja-. Este último quedó pendiente de formalizar con la paralización de plazos por el estado de alarma.
En total suman más de 20 millones de euros de gasto público que se desembolsa sin mediar contrato. Algo que ocurre pese a que para todas la situaciones desde que se adjudica el servicio los técnicos municipales conocen con exactitud la fecha en la que expira el contrato y sus prórrogas.
