El próximo miércoles 3 de junio abrirán todas las playas del término municipal de Pilar de la Horadada para que los ciudadanos puedan pasear, bañarse y tomar el sol en la arena, una vez ha entrado el municipio, como el resto de la Comunidad Valenciana, en la fase 2 de la desescalada por la crisis sanitaria. Los arenales estarán abiertos para actividades hasta ahora no permitidas, como darse un baño en el mar o tumbarse en la arena. Eso sí, habrá que respetar tanto el aforo como la distancia social de dos metros entre bañistas. El Ayuntamiento de Pilar de la Horadada lamenta no contar, en este sentido, con personal municipal suficiente para hacer los controles en cada uno de los accesos (uno de los problemas principales con los que se han encontrado todos los municipios). Así que no habrá vigilancia permanente para que se cumplan las medidas de seguridad e higiene por el coronavirus, por lo que el consistorio pilareño apela a la responsabilidad individual. No obstante, tanto la Policía Local como Protección Civil acudirán a las playas para vigilar que no se sobrepasa el aforo y se cumple la distancia.

El concejal de Medio Ambiente de Pilar de la Horadada, Pedro Miguel Moya Albaladejo, ha explicado que, desde que se anunció oficialmente que la totalidad de los municipios de la Comunidad Valenciana pasarían a fase 2 del plan para la transición hacia una nueva normalidad a principios de junio, las áreas de Turismo, Medio ambiente y Servicios Públicos se han puesto manos a la obra para adaptar las playas a las exigencias de la normativa vigente en cuanto al uso y acceso a las playas del Ministerio de Sanidad. Antes de abrir las playas, según explica el concejal Moya, se tienen que "acondicionar debidamente los accesos, señalizar todas las entradas y colocar la cartelería informativa, retirar las pasarelas, dejar sin servicio los lavapiés y aseos hasta que se pueda garantizar su seguridad sanitaria", y otros trabajos tendentes a adaptar las playas de Pilar de la Horadada a la nueva normalidad, que se realizarán durante los próximos días.

Las playas del municipio se han visto fuertemente golpeadas, primero en septiembre pasado con la DANA, y sobre todo en enero con el temporal Gloria. Ambos temporales redujeron la amplitud de las playas como consecuencia de la pérdida de arena. Este hecho es un condicionante más, puesto que "condicionará la capacidad de aforo de las mismas". El Ayuntamiento ha realizado los trabajos de su competencia, pero faltan parte de los trabajos que debe realizar el Ministerio para la Transición Ecológica como, por ejemplo, la rampa de la playa del Conde, o las escaleras en calas Rocamar o el paseo del Mojón.

El Ayuntamiento de Pilar de la Horadada recuerda a los usuarios que la ubicación de los objetos personales, toallas, tumbonas y elementos similares se debe llevar a cabo de modo que se garantice un perímetro de seguridad de dos metros con respecto a otros usuarios, salvo en el caso de bañistas convivientes o que no superen el número máximo de 15 personas en grupo. Además, se deberá de dejar una distancia mínima de 6 metros desde el agua hasta la primera fila de personas, sombrillas, toallas, hamacas, enseres personales, etc. Para garantizar la circulación de personas por la orilla del mar, en este espacio se deberá circular siempre por la derecha, de tal forma que las personas que circulen más próximas al agua sean aquellas que se dirigen hacia el norte; es decir, con el mar en su lado derecho.

Las piscinas municipales, por otro lado, seguirán cerradas hasta que se pueda garantizar el cumplimiento de todas las condiciones establecidas en materia de seguridad sanitaria.