El Ayuntamiento de Dolores va a estrenar en breve una escultura dedicada al producto estrella de la agricultura de la huerta tradicional: la alcachofa. El municipio inició el proyecto hace tres años -antes de la DANA y la crisis sanitaria-. La pieza de Manuel Gomáriz ha costado 17.000 y presidirá la glorieta -remodelada por la Diputación por 112.000 - en la carretera que une Dolores con San Fulgencio.

El alcalde Joaquín Hernández (PSOE) ha explicado que el proyecto se fraguó hace unos tres años como una idea del tejido empresarial y asociaciones locales con el objetivo de que la alcachofa de Dolores y la Vega Baja tuviera una imagen de referencia.

La comarca pelea desde hace años por la consecución de una indicación geográfica protegida o una denominación de origen para la alcacchofa de la Vega Baja. La producción anual se sitúa entre 25.000 y 30.000 toneladas, incluyendo las tierras regadas por el trasvase Tajo-Segura.

La mayor parte de la producción junto al río Segura se perdió por las inundaciones de la DANA, en especial en Dolores, San Fulgencio, Daya Nueva y Daya Vieja y Guardamar.

La producción de alcachofa -arcasil o alcasil en correcto vegabajero- es una de las más rentables de la huerta tradicional de la Vega Baja. La de Dolores y las poblaciones más cercanas al Hondo de Elche se caraterizan por crecer un suelo fértil pero al tiempo con una proporción de sal mayor que otras zonas de la comarca: son terrenos ganados a zonas de saladar. El primer edil también indicó que la Diputación Provincial se mostró de acuerdo con adornar la rotonda que está terminando con este monumento. El escultor Gomáriz es también autor de la Magrana en Elche.

No es la primera rotonda del país adornada con una escultura de Alcachofa. Una de las glorietas de acceso a Benicarló (Castellón) también cuenta con un monumento dedicado a este producto, en aquellas tierras con denominación de origen.