El conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España, ha mantenido esta mañana una reunión de trabajo con la práctica totalidad de los alcaldes de la Vega Baja en el Auditorio Internacional de Torrevieja para analizar el futuro de las infraestructuras en la comarca, en una jornada que le ha llevado posteriormente al Puerto de Torrevieja, donde también ha anunciado inversiones y que para los representantes del Consell finalizaba en Guardamar donde se presenta esta tarde las líneas maestras del Plan Renhace, el proyecto de Ximo Puig para recuperar la Vega Baja tras el desastre de la Dana del pasado septiembre.

"Estamos haciendo este año, alrededor de más de 40 que abarcan muchos municipios y que representan una inversión de 16 millones de euros", ha dicho el responsable político que ha sido muy claro con los regidores: "Vamos a prometer aquello que podamos cumplir". En una coyuntura difícil como la actual, la reunión, de hora y media, ha pasado de puntillas por algunos de los asuntos que serán clave en un futuro a corto y medio plazo para la Generalitat Valenciana, como la movilidad sostenible, temas que los alcaldes han escuchado sin apenas más queja que los asuntos y reivindicaciones habituales: el futuro de la CV-95, entre Orihuela y Torrevieja, o los peajes de la autopista Crevillent-Cartagena que, caso insólito, solo pagan aquellos vehículos que transitan por la Vega Baja (Torrevieja, Orihuela Costa y Pilar de la Horadada).

El conseller España ha pedido a los regidores que cuestionaran o plantearan cualquier actuación o expresaran sus dudas a sabiendas que junto a él se sentaba una de las personas que mejor conoce la Vega Baja, el subdirector general de Movilidad, Josep Llin. También estuvo acompañado el titular de Infraestructuras por la directora general de Análisis y Políticas Públicas de Presidencia del Consell, Ana Berenguer, y de los dos comisionados del Plan de la Vega Baja, rebautizado con el nombre de Renhace, Jorge Olcina y Antonio Alonso, que se ha convertido en la piedra filosofal en una comarca en la que no quiere perder peso específico Puig.

Arcadi España ha explicado que el proyecto que se está realizando en estos momentos en la comarca, "se trata de actuaciones relacionadas con la nueva movilidad, carriles ciclopeatonales o mejora de la seguridad vial, también obras de drenaje de las carreteras para evitar que actúen de barrera en caso de grandes lluvias".

Torrevieja y Orihuela

Asimismo, Arcadi España ha indicado que "estas obras son el presente y debemos tratar los instrumentos que necesitamos para planificar bien la evolución futura de la comarca de la Vega Baja". Y en esta cuestión, si la CV-95 va a ser una carretera básica para la comarca pero desdoblada, es decir, un enlace rápido hacia la costa, va a ser un tema crucial porque los alcaldes de las dos "capitales", Emilio Bascuñana y Eduardo Dolón, de Orihuela y Torrevieja, salieron desde el primer momento a reclamar soluciones que, por los años que se llevan reivindicando, no deben de ser fáciles y, por lo que se ha escuchado, tampoco tienen que coincidir con las necesidades reales que para el Consell y sus técnicos debe tener esta vía que el regidor oriolano calificó de un lastre para sus ciudadanos mientras siga como está. Ahora bien, los datos son los que son y los 9.000 vehículos de paso diario que "las máquinas y no las personas" han medido a diario, especificó el subdirector general, difícilmente van a justificar una inversión como la que llevan años reclamando los regidores colindantes para la vía y que incluirían una dolorosa factura en expropiaciones. El Consell lo fía todo al informe que ha solicitado y que tendrá que darle argumentos para una cosa u otra. Dolón estuvo muy ácido con el enlace entres esta vía y Torrevieja, un "infierno de 3,5 kilómetros de recorrido" al que nadie le sabe dar solución. Al respecto, Llin hizo un comentario que no pasó desapercibido cuando recordó una anécdota con "Pedro", refiriéndose al que fue alcalde hasta 2012, Pedro Ángel Hernández Mateo, cuando ambos se sentaban a buscar soluciones en reuniones y él le decía "Pedro, pero por dónde tiro la raya", refiriéndose a dónde ubicaba una carretera en condiciones.

Llin fue muy explícito con los accesos a Torrevieja, todos, absolutamente todos, están colapsados y reciben una medida diaria, cada uno de ellos de 25.000 coches. Un dato que, visto cómo son las entradas y salidas, se explica que el municipio sea un punto negro para el tráfico durante todo el año. El problema, está claro, se conoce, pero nadie le sabe poner solución. Al menos no hubo críticas hacia la gestión que en materia de urbanismo han hecho los ayuntamientos durante los últimos años, colmatando barrancos con viviendas, algo que por lo que parece, pasará a la historia.

El conseller no negó ni mucho menos la importancia que la CV-95 tiene pero es más que probable que el proyecto que finalmente se desarrolle no sea el que esperan los regidores. Así dijo que es "vital" dentro del Plan de Movilidad para "agrupar y saber unir todos los municipios que tienen una densidad de población muy grande", pero se quedó en esa frase. Ahora bien, lo que va a pagar el Consell, por ahora es un "estudio de viabilidad", nada más.

España también se refirió a uno de los asuntos, en estos momentos, más temidos por los promotores, como es el nuevo Plan de Acción Territorial (PAT) de la Vega Baja que "nos permitirá coordinar toda la actuación urbanística y pronto, después del verano, impulsaremos tres estudios muy importantes". De hecho, al término de la reunión hubo un segundo encuentro con este colectivo para explicarles los pormenores del citado documento técnico en estos momentos en elaboración.

Para el conseller, todo lo presentado, "se trata de actuaciones a corto plazo, que ya estamos realizando, y actuaciones a largo plazo, pero entre todos tenemos que planificar esa Vega Baja del futuro más resiliente, más duradera y más preparada para la recuperación económica".

Por último, ha insistido en que el objetivo de la conselleria es "fortalecer este territorio frente a futuros episodios como la DANA al mismo tiempo que impulsamos el desarrollo de la comarca", y ha reiterado la necesidad de "consensuar entre todos, las posibles mejoras que se puedan hacer en materia de infraestructuras en la Vega Baja".