Autocares La Inmaculada ha remitido una carta a los representantes de las asociaciones de padres de alumnos de Torrevieja en la que advierte que el Ayuntamiento ha incumplido su compromiso de abonar un millón de euros que le adeuda por la prestación del servicio de transporte escolar del ejercicio 2014-2015. La última anualidad del anterior mandato de Eduardo Dolón (PP) como alcalde.
La Inmaculada asegura en la carta a los padres que había mantenido negociaciones con el Consistorio en los últimos meses para no tener que recurrir a la demanda en los juzgados y que el compromiso del concejal de Educación, Ricardo Recuero, era cumplir con el abono ante del 31 de enero pasado. Algo que no ocurrió. Es más, este mes de junio, y ante la demanda judicial de la empresa, que atraviesa una difícil situación económica que puede derivar en la solicitud de concurso de acreedores, los servicios jurídicos del Ayuntamiento dejaron constancia en el juzgado de que consideran que los últimos responsables del impago son las asociaciones de padres.
Este marasmo legal tiene su origen en una idea para «salvar» el modelo de transporte gratuito implantado en Torrevieja durante los años de bonanza económica y que se derrumbó con la crisis. En aquel mandato, desde el curso 2011-2012, el gobierno local ideó un polémico sistema para mantener el transporte escolar gratuito. Para eludir la legislación que le impedía realizar ese enorme desembolso de gasto público por los planes de ajuste de forma directa hizo responsable a cada una de las asociaciones de padres, como intermediarias, de contratar el transporte y la gestión y el pago. El Ayuntamiento pagaría la prestación a modo de subvención a través de los padres y estos a la empresa.
El alcalde, con los padres
Una auditoria interna del Ayuntamiento cuestionó ese sistema y detectó irregularidades contables. El entonces alcalde José Manuel Dolón (Los Verdes) bloqueó el abono de la subvención por esas dudas sobre el funcionamiento del sistema y la intermediación de la APAs -la auditoria señalaba a una delegación de una Federación Provincial de Padres, no al resto de asociaciones-.
El alcalde Eduardo Dolón reunió la semana pasada a las asociaciones de padres -en la mayor parte ya no están las directivas que tuvieron que afrontar esa gestión- para desmentir a la Inmaculada y asegurar que el Consistorio no les ha atribuido responsabilidad alguna. El gobierno, sin embargo se niega a abonar la deuda pese que acaba de aprobar en el pleno el pago de reconocimientos extrajudiciales de créditos del área de Fiestas con los informes de Intervención en contra.
Un abogado de una federación de padres ha propuesto a las APAs que cedan "el derecho de crédito" que, asegura, tienen con el Ayuntamiento a la propia empresa de transporte, para intentar eludir cualquier tipo de responsabilidad, en el momento en el que el municipio considere que puede abonar legalmente el importe adeudado.
Sin embargo, el compromiso del municipio era por el aporte de una subvención que no se hizo efectivo y no por un crédito y los padres de alumnos con quien sí se obligaron a cumplir un acuerdo es con la empresa, a través de la fórmula contractual que los propuso el alcalde, Eduardo Dolón para resolver el problema del transporte.
La Federación de APAs de Enric Valor ha aclarado que "no tiene nada que ver" con cualquier contrato o gestión ligada a esas subvenciones.
