Un pasillo de agentes de Policía Local uniformados para despedir el féretro del que fuera durante 26 años concejal en el Ayuntamiento de Torrevieja, Eduardo Gil Rebollo. Ha sido una de las imágenes que ha dejado el emotivo funeral que se ha celebrado en la parroquia de Nuestra Señora del Rosario de La Mata, la pedanía en la que nació y murió el expolítico. Su carácter campechano le granjeó muchas amistades y hoy se ha demostrado con la multitudinaria asistencia, cumpliendo todas las estrictas medidas de seguridad. El alcalde Eduardo Dolón, el exregidor Pedro Hernández Mateo y ediles y exconcejales de diversos mandatos, no han querido faltar para dar su último adiós al que todos llamaban "amigo".

Eduardo Gil Rebollo, falleció ayer a causa de un infarto a los 62 años de edad. Concejal desde 1993 hasta 2019, en este mandato era asesor de Playas, Transportes, Puertos y Pesca del equipo de gobierno. El exedil del PP, gran aficionado al mar y a la pesca, murió de un infarto fulminante cuando se encontraba en su embarcación. Su fallecimiento ha causado una gran consternación en la ciudad donde era muy conocido, uno de los políticos que habían sido más queridos por su carácter afable durante sus 26 años con distintas responsabilidades en el consistorio torrevejense. Sobre todo ha causado conmoción en la pedanía de La Mata, donde nació. Muchos vecinos "materos", entre lágrimas, han despedido al que fue el gran artífice de la conversión de un pueblo en un destino turístico residencial de primer orden.