Nuevos aires para el área recreativa de San Cristóbal, en el Pinar de Bonanza de Orihuela. El espacio, que estaba abandonado desde 2014, servirá de base para las rutas por la Sierra de Orihuela tras su rehabilitación. La reestructuración de esta zona recreativa se ha realizado bajo los principios «de sostenibilidad», explicó ayer el edil de Medio Ambiente, Dámaso Aparicio, quien junto al alcalde de la ciudad, Emilio Bascuñana, visitó este espacio natural en el que se han instalado más mesas de picnic y se han acondicionado algunas de las casetas de madera que había donde hace unos años se podía pernoctar, algo que se ha eliminado.

Ambos estuvieron acompañados en la visita por el primer teniente alcalde, José Aix, y el concejal de Infraestructuras, Ángel Noguera, además del alcalde pedáneo del Raiguero de Bonanza, Raúl Pardines. Aparicio señaló que «la zona reúne todos los factores que un área recreativa debe tener como son cualidades naturales y paisajísticas, recursos autóctonos, distancia al mercado potencial, accesibilidad y servicios y equipamientos apropiados (...) y ya está abierta al público para el uso y disfrute de los oriolanos, visitantes y turistas».

El área recreativa había sido sometida a numerosos actos vandálicos y también los okupas habían hecho suyas las cabañas que se instalaron en su día para la pernocta. Su vergonzoso abandono, en una zona de gran valor ambiental, terminó con el proyecto de la Concejalía de Medio Ambiente para poner en valor este espacio. Eso sí, el área recreativa de San Cristóbal ha dejado de ser el único alojamiento en la Sierra de Orihuela. De hecho, desde finales de 2014, nadie ha pernoctado en las cabañas de madera instaladas para tal fin y gestionadas entonces por una empresa. Desde que el Ayuntamiento rescindiera el contrato por incumplimientos con la última adjudicataria, hace seis años, el área dejó de recibir la atención necesaria.

Integral

En la rehabilitación integral del área recreativa, de 4.500 metros cuadrados, se han dispuesto más merenderos y nuevos aseos. De las cabañas habitables, la mayoría se han trasladado al soto del río para usarse en los futuros huertos urbanos. No obstante, se han quedado otras que se han rehabilitado como espacios diáfanos para comer, otra para aseos y otra se usará como cenador. Todas ellas estaban en un estado lamentable, con cristales rotos, sin ventanas y con la cerradura de las puertas inservible. Una vez restauradas, podrán ser usadas por quien quiera pasar el día en esta área recreativa gratuitamente, siempre y cuando soliciten un permiso con 48 horas de antelación a la Concejalía de Medio Ambiente, de manera presencial o por internet, y firmen una declaración responsable a la entrega de las llaves de las cabañas que hayan pedido usar. En todos los casos, estará prohibido pasar allí la noche.

Bascuñana señaló que «este espacio aporta mucho al Raiguero y estoy convencido de que nuestros vecinos de la comarca también vendrán a disfrutar de este entorno tan especial». El regidor también apeló a la «responsabilidad de toda la ciudadanía para disfrutar de estas instalaciones municipales y que podamos mantenerlas en el mejor estado posible». El alcalde pedáneo del Raiguero de Bonanza agradeció al Ayuntamiento de Orihuela «que haya recuperado este paraje natural porque una parte del corazón de los vecinos de esta pedanía está aquí».

Impresionantes vistas

Con unas impresionantes vistas de Orihuela y rodeada de una exuberante vegetación a de pinos y matorral, el área recreativa de Pinar de Bonanza con cabañas habitables se inauguró en 2009. La entonces alcaldesa, Mónica Lorente (PP), dijo que era uno de los proyectos de los que se sentía más orgullosa tras concluir la puesta en valor de las laderas de la Sierra de Orihuela, que costó 276.938 euros. Años después, cualquiera que accediera a este complejo venido a menos del paraje de San Cristóbal en la pedanía de Raiguero de Bonanza, se encontraba un panorama diferente, con ventanas rotas, cerraduras reventadas, grafitis en puertas interiores, picaportes arrancados y equipamiento eléctrico y sanitario saqueado.

La intención del Ayuntamiento es que este espacio de la Sierra de Orihuela, cuya rehabilitación y restauración de las cabañas supone una inversión de 47.531 euros, se asimile a otros, como el que hay en la Sierra de Redován o la Cueva Ahumada de Callosa de Segura. Para disfrutar de la naturaleza.