El conflicto entre dos administraciones, el Ayuntamiento de Orihuela y la Generalitat, ha dejado un parque infantil de la pedanía de El Escorratel sumido en el abandono. El Ayuntamiento de Orihuela construyó ese parque en unos terrenos de la Generalitat hace nueve años, pero no formalizó el acuerdo de cesión y ahora ni una ni otra administración se encargan de su mantenimiento, al que se comprometió el consistorio oriolano. Los niños de la pedanía han visto así como su parque infantil ha ido deteriorándose tanto que ha dejado las instalaciones casi inservibles.

El Ayuntamiento de Orihuela inauguró en 2011, con la popular Mónica Lorente como alcaldesa, ese espacio de ocio que cuenta con juegos, suelo de caucho y bancos para recreo. Era una demandada petición vecinal y el consistorio usó la zona ajardinada del Centro de Formación del Servef, de la Generalitat, para construir ese parque, tras haberlo acordado con el organismo autonómico. Sin embargo, la cesión de esos terrenos al Ayuntamiento, que se comprometía a su mantenimiento, nunca llegó a formalizarse por escrito y once años después el parque está en un lamentable estado.

El consistorio oriolano se ha desentendido en los últimos meses de su limpieza y conservación al alegar que los terrenos son de la Generalitat y que debe ser ésta la que se ocupe del espacio infantil mientras no se firme el acuerdo de cesión de los terrenos. Desde la Concejalía de Infraestructuras señalan a INFORMACIÓN, no obstante, que están en contacto con la administración autonómica. que no ha puesto reparos en que se formalice ese convenio de cesión de los terrenos y acabar con ese deplorable estado que presenta el parque infantil.

Solo quedan algunas de las losetas del suelo de corcho y el cartel que indica las normas del parque ni se ve de lo quemado que está por el sol. Sí se pueden usar el tobogán o los columpios, aunque con precaución por la falta del suelo de seguridad. La DANA de septiembre de 2019 dejó muy dañadas las instalaciones en una pedanía que sufrió de lleno la avenida de agua de la rambla de Abanilla.

La edil socialista María García lamenta la actitud «ridícula e infantil» del edil de Infraestructuras Ángel Noguera (Cs). «Es incomprensible que alguien que pagamos todos los oriolanos para que resuelva nuestros problemas se lave las manos y deje a los vecinos sin soluciones». García recuerda el pasado de Noguera como militante del PP «por lo que debería saber que lo inauguró la señora Lorente» y le reprocha que «si hubiese preguntado en Patrimonio, tal y como hemos hecho desde el PSOE, sabría que este parque lo construyó el ayuntamiento para uso y disfrute de los vecinos y lo ha mantenido durante 10 años. En 2009 la dirección territorial del SERVEF no puso ningún impedimento para designar este espacio a zona de jardín para uso de los vecinos, pero sí indicó al ayuntamiento que era necesario solicitar la cesión formal del uso del suelo», algo que no se ha hecho aún. Desde la Concejalía de Infraestructuras defienden que debe ser la administración superior, en este caso la Generalitat, la que solicite que se firme el convenio formal de cesión, y no el Ayuntamiento el que lo reclame.