Los tres partidos en la oposición en Rojales -PP, Pader y Cs- se han unido para forzar la convocatoria de un pleno extraordinario en el que van a pedir explicaciones al gobierno local del PSOE tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) que ordena reabrir el concurso-oposición para la plaza de intendente del municipio que se declaró desierto en 2014. Como adelantó INFORMACIÓN, el tribunal manda corregir de nuevo el examen de uno de los aspirantes a jefe de la Policía Local quien, tras obtener un 4,5 de nota, recurrió su calificación. El Ayuntamiento, como señaló a este diario el alcalde Antonio Pérez, deberá ahora recomponer el tribunal para evaluar la prueba seis años después de realizarse y tras haber declarado desierto ese concurso después de que todos los aspirantes suspendieran. De hecho, el viernes se reunió el nuevo tribunal para calificar el examen recurrido.

El portavoz adjunto del PP, José Plaza, señala que «es inconcebible que el alcalde tenga la sentencia en un cajón varios meses y no haya ni sido capaz de informar a los concejales de la oposición, puesto que la sentencia no ha sido comunicada al Ayuntamiento vía registro de entrada y los ediles hemos tenido conocimiento de la misma por INFORMACIÓN». Desde el PP critican que el regidor no dudara en entregarle al intendente actual su plaza, primero por mejora de empleo y más adelante por promoción interna en su condición de inspector. «Es difícil predecir lo que pueda pasar, pero en caso de que el aspirante ahora supere las pruebas nos podríamos encontrar con dos intendentes», señala Plaza. El edil del PP recuerda que el actual intendente «ha sido objeto de polémicas por el cobro de horas extra y complementos, que el alcalde retiró tras denunciarlo el PP, al tener reconocidas la disponibilidad y exclusividad en su RPT como intendente».