A partir de ahora, el Ayuntamiento de Pilar de la Horadada se ocupará de la conservación de las zonas y espacios públicos de la urbanización “Lo Romero Golf”. El alcalde de Pilar de la Horadada, José María Pérez Sánchez (PP), ha recibido a Agustín Martínez de Urdemasa, a Isaac Sánchez y Rubén Grau, de Horadada Golf Center, quienes han formalizado en un documento los detalles de las obras de urbanización de “Lo Romero Golf”, situada en la carretera que une Pilar de la Horadada con Pinar de Campoverde.

La recepción contempla todas las zonas verdes y parques, con una superficie de 37.279 metros cuadrados, zonas de equipamiento deportivos de 26.641 metros cuadrados, otras parcelas con destino a servicios técnicos de titularidad municipal, una red viaria de 121.951 metros cuadrados, red viaria peatonal de 4 kilómetros lineales y 74.629 metros cuadrados de superficie, además de otras parcelas para servicios públicos de abastecimiento, saneamiento, estaciones de bombeo, ruego, agua potable así como la iluminación de las zonas públicas y sus viales.

La recepción también conlleva la banda de protección de infraestructuras, es decir, la servidumbre de carreteras junto a la CV-925 de 11.492 metros cuadrados, dispuesta a una posible ampliación o desdoblamiento de la calzada en un futuro. El coste anual del mantenimiento de estos espacios públicos será de 180.000 euros, según fuentes municipales.

"Han tenido que pasar 15 años" hasta su recepción definitiva -el convenio de urbanización se firmó en 2005-. Al inicio de este mandato, según explican fuentes del equipo de gobierno del PP a INFORMACIÓN, el Ayuntamiento se comprometió con los vecinos a “desatascar” todos los temas que "dormían en el letargo años atrás. Y este era uno de ellos. Con la recepción definitiva se produce el empujón que la urbanización de Lo Romero Golf necesita".

Imagen de la visita del alcalde y los urbanizadores de Lo Romero Golf para el trámite de recepción de la urbanización

Desde su aprobación este sector de Pilar de la Horadada puso en marcha a pleno rendimiento su campo de golf. No así la construcción de viviendas. Del total de las que contempla el proyecto -en torno a 1.000- no se han levantado ni un diez por ciento. Entre el inicio de la urbanización y hasta la fecha se han presentado 128 proyectos de viviendas pero se han comercializado con licencia de primera ocupación 65.

La recepción oficial de una urbanización supone que todos los servicios públicos desarrollados sobre el terreno por el promotor se ajustan al proyecto presentado en su día. Y por lo tanto el municipio se hace responsable de su buen funcionamiento. Algo que en una parte importante de las urbanizaciones turístico residenciales de la comarca se ha incumplido de forma sistemática aunque en los últimos años los ayuntamientos no están autorizando la tramitación de estudios de detalle -para construir manzanas- o licencias de obra mayor sin la urbanización recepcionada.

EL QUEBRADERO DE CABEZA DE LA RECEPCIÓN DE LAS URBANIZACIONES

El hecho de que una urbanización no sea recepcionada oficialmente por un municipio se convierte en un auténtico quebradero de cabeza para el Ayuntamiento de turno, y sobre todo, para los vecinos que bajo el argumento de la falta de recepción municipal no reciben servicios básicos, como el mantenimiento de zonas verdes y alumbrado.


Los urbanizadores con proyecto aprobado deben presentan un aval para cubrir los posibles incumplimientos en el proceso de urbanización. Pero en ocasiones se devuelve a las empresas cuando ya han construido y vendido las viviendas sin que se haya recepcionado por el Ayuntamiento, ni verificar sobre el terreno si hay deficiencias. En este caso se encuentran docenas de residenciales de Orihuela Costa y Torrevieja.


Muchas promotoras, durante el boom inmobiliario de hace quince años, se desentendieron de la finalización de las obras una vez que habían compensado sobradamente la inversión con la venta de viviendas.Los municipios otorgaban cientos de licencias porque suponían importantes ingresos directos en las arcas municipales sin comprobar sobre el terreno si se ejecutaban viales, colectores, alumbrados, aceras y otras infraestructuras conforme al proyecto aprobado.


Ante las reclamaciones vecinales los juzgados han entendido que los ayuntamientos ha recepcionado de forma tácita la mayoría de estos sectores porque realizan servicios como la recogida de basura y aseo urbano. Incluso ya están asumiendo esa responsabilidad en el momento en el que permiten que las calles y los parques estén abiertos al paso de vehículos y peatones bajo su responsabilidad. Pero incluso con resoluciones judiciales siguen sin asumir otros servicios como el mantenimiento de zonas verdes -mucho más costoso-.


De ahí que los municipios, tras décadas de desaguisados urbanísticos, hayan decidido no permitir la aprobación de estudios de detalle -las manzanas de viviendas- hasta no asegurarse de que todo esté en condiciones. En teoría los avales no devueltos deberían responder por las deficiencias pero en muchas ocasiones o ya han sido recuperados incomprensible por los urbanizadores o no se ejecutan y siguen formalmente en manos de los municipios.


Ejemplos claros de esta nueva estrategia de no permitir licencias sin una recepción formal supervisada por los técnicos sobre el terreno e informada fueron durente al anterior mandato municipal las urbanizaciones La Coronelita y Villa Amalia en Torrevieja.